El regidor municipal de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, suspenderá temporalmente el teletrabajo en el Ayuntamiento y promoverá una modificación de la ordenanza que lo regula.
El alcalde ha firmado una providencia con la finalidad de que se activen «los mecanismos necesarios» para llevar a cabo esta suspensión de carácter temporal, que afectará a 130 personas que tenían la autorización y que, en los próximos días, se le notificará a todo el personal municipal.
«En campaña electoral entoné el mea culpa y dije que el mayor error como alcalde fue llevar al pleno la ordenanza del teletrabajo», ha sostenido Pérez Jácome añadiendo que, a pesar de que la normativa fue aprobada por unanimidad por la Corporación, «ya intuía que no era buena y lamento haber aceptado».
En estos términos ha asegurado que comienza un nuevo mandato 2023-2027 en el que se pondrán en marcha todos los mecanismos para suspender el teletrabajo y, al mismo tiempo, se iniciará una modificación de la ordenanza municipal para «hacerla mucho más objetiva, práctica y funcional».
Los motivos en los que se basa esta decisión parten, según ha explicado el alcalde, de la reorganización del nuevo mandato que «requiere presencia física» del personal municipal, pero también porque aunque «en los últimos cuatro años pusimos en marcha el ayuntamiento, aún está oxidado y hay un retraso de expedientes que no se puede tolerar».
SIGUIENDO A LA XUNTA, DICE
Así, con la suspensión del trabajo y la modificación de la ordenanza, considera que se «mejorará» la funcionalidad del consistorio y que, además, «sigue la tendencia de la Xunta de Galicia» donde «realmente hay una reducción del teletrabajo», porque «parece que lo más eficaz en todas las organizaciones, sean privadas o públicas, es la presencia física».
Con todo, el alcalde de la tercera ciudad de Galicia pone el foco en los que solicitan el teletrabajo los lunes y los viernes, «es una tomadura de pelo», ha criticado, para apostillar que «se hace para empalmar con el fin de semana o hacer más largos los fines de semana sin tener nada que ver con el teletrabajo».
Así las cosas, la suspensión tendrá carácter temporal mientras elaboran la modificación de la ordenanza municipal que tiene que recibir la aprobación del Pleno del Ayuntamiento.