La compañía de teatro gallega A Panadaría ha denunciado insultos vejatorios de adolescentes en una función de ‘As que limpan’ en el Espal, un festival solidario que se celebra en Santa Lucía de Tirajana, en Gran Canaria, con una función para 600 personas, alumnado de institutos.
En su página de Facebook, A Panadería explica que al inicio de la función comenzaron a oír gritos y «un ruido ensordecedor a todo volumen» que, según destaca, «nada tenía que ver con los murmurios y risas de cualquier otra función escolar» que hubieran hecho antes.
En ese momento, entre los gritos escuchan la voz de un joven que grita «¡Limpia, puta!». A partir de ahí, censura, fueron 90 minutos de «silbidos, insultos, abucheos, comentarios sexuales, grupos entrando y saliendo del teatro, risas burlonas y amenazas». Además, durante toda la obra asegura que se repetían los gritos de «¡putas, putas!».
«Qué pronto aprenden los hombres a insultarnos con ese ‘puta’. El peor insulto, el más humillante, el que no tiene equivalente en masculino (¿o si? Ay, sí, hijo de puta). Y dicen puta y tratan de humillarnos, como si nuestro cuerpo no fuera nuestro, como si nuestra dignidad dependiese de que hagamos o no con él lo que nos pete», denuncian las actrices.
Al final de la función, Ailén, una de las actrices, señaló que «puta no es un insulto», mientras que lo que sí que es un insulto es «ser putero». «¿La respuesta?», cuestionan, «más gritos».
«Y sí, si ladran, si aúllan, si enseñan los dientes es porque piensan que se tienen que defender. Piensan que no merecemos tener voz, ni espacio, porque el mundo es de ellos y nosotras (putas, chachas) estamos a su servicio», expone.
Para concluir el comunicado, la compañía agradece al alumnado del Espal que «no fueron manada», así como a la organización por «intentar acercar un espectáculo feminista como ‘As que limpan’ a los más jóvenes». «Seguimos adelante, el mundo va a ser feminista porque no vamos a parar», zanja.