El colectivo de personas jubiladas y pensionistas de la CIG se ha movilizado este jueves en todas las ciudades gallegas en defensa de las pensiones públicas y para denunciar que sus vidas están «cada vez más empobrecidas y precarizadas» como consecuencia de la reforma de las pensiones, de los «abusos» de la banca, de la falta de un servicio público de atención a las personas y de las «deficiencias» de la sanidad.
Por ello, en esta ocasión muchas de las concentraciones en las ciudades se llevaron a cabo delante de los hospitales o edificios de sanidad, para «reclamar una atención digna a las personas, sobre todo, en los momentos más vulnerables», y demandar una atención sanitaria «lo mejor posible, prestada desde una sanidad pública fuerte, con personal e infraestructuras suficientes y adecuadas».
El colectivo ha subrayado que con la llegada de la pandemia, se pusieron «en evidencia las carencias» que su progresivo «desmantelamiento» provocó.
En este sentido, y tras elogiar a los trabajadores sanitarios, responsabilizaron a las «políticas privatizadoras del PP» de las «enormes listas de espera», incluso en atención primaria, y de la «falta de profesionales», así como del cierre de centros.
Los jubilados y pensionistas demandaron, además, «cambios» en las políticas de atención a las personas. En este sentido, recordaron que Galicia «padece las segundas pensiones más bajas» del Estado, y que dada la falta de recursos, esto hace que muchas personas «no puedan accedera los servicios de atención, condenando una vez más a las mujeres a seguir ejerciendo de cuidadoras».