El centro penitenciario de Pereiro de Aguiar (Ourense) y la delegación territorial de la Xunta en Lugo registran sendos brotes de covid-19 con, por el momento, cinco y ocho casos confirmados, respectivamente.
El brote en la cárcel situada en el municipio ourensano de Pereiro de Aguiar se originó por el contagio de un recluso de régimen abierto que sólo pernocta en el centro.
Según ha explicado el director del centro, Francisco González, el recluso llamó a la prisión el pasado jueves para informar que se encontraba en urgencias del centro hospitalario de la provincia, que había dado positivo en una PCR y que probablemente tendría que quedarse ingresado.
Esta persona continúa hospitalizada, aunque evoluciona favorablemente, según apunta el responsable de la prisión, donde los contagios se han dado entre reclusos que se encuentran en el módulo de semilibertad, que acoge a 26 personas.
Todas ellas fueron informadas de lo sucedido al tener la consideración de contacto estrecho, no por haber mantenido contacto «directo» con el positivo sino por compartir las mismas dependencias.
Así, la dirección del centro decidió enviarlos al domicilio para que realizasen allí la debida cuarentena. Para ello, firmaron un papel por el que se comprometían a hacer la cuarentena.
Desde el positivo del jueves, cuatro reclusos más han dado positivo, mientras que ocho son negativos y trece están pendiente de los resultados. De todos ellos, sólo uno continúa interno en la prisión por no tener un domicilio en el exterior, aunque se encuentra «completamente aislado».
Además de los tres positivos que guardan cuarentena en sus hogares y el origen del brote que se encuentra en el hospital, también se encuentra aislado en su domicilio un funcionario que trabaja en la sección abierta. En este caso, el trabajador dio negativo, aunque debe guardar cuarentena por protocolo.
Francisco González ha explicado que, en esta misma sección se encontraban unos internos haciendo formación en Ourense por lo que se trasladaban desde el centro hasta la ciudad en dos taxis. Los dos taxistas también fueron considerados contactos directos y se encuentran en cuarentena, aunque también han dado negativos.
A raíz de estos positivos, el centro penitenciario ha estado en contacto con el Sergas para que se realice un cribado en la prisión, «tanto a reclusos internos como no internos y a funcionarios y funcionarias, pero aún sin fecha». «Estamos esperando a concertar», ha apostillado el director de Pereiro de Aguiar.
BROTE EN LA XUNTA DE LUGO
Por otra parte, la delegación territorial de la Xunta en Lugo también registra otro brote, que afecta, por el momento, a ocho trabajadores de la planta baja de las dependencias de la Administración autonómica en la Cidade das Murallas.
Según fuentes de la delegación consultadas por Europa Press, el origen del brote está en el contagio de un empleado de la Consellería de Política Social, departamento que suma otros seis empleados con covid-19. El otro caso es de una persona de la plantilla de la Amtega.
Así, el Sergas tiene previsto realizar un cribado entre todos los trabajadores de la planta baja del edificio debido a que «comparten zonas comunes». Está previsto que las pruebas se realizasen a lo largo de este martes.