Entidades sociales gallegas hacen un llamamiento «de auxilio» a los casi 600.000 gallegos que no marcaron la ‘X solidaria’ de la renta en la campaña de 2020 para que sí lo hagan en la que acaba de arrancar este año.
Ante la actual crisis sanitaria y social, lanzan un mensaje «de emergencia solidaria» a estas personas, al calcular que, de marcarla, serían 13 millones de euros más los que se podrían destinar a programas «más que nunca necesarios», para combatir la pobreza y el riesgo de exclusión.
Un grupo de representantes e integrantes de colectivos sociales han protagonizado un breve y simbólico acto este jueves en la Praza da Quintana, que se replica en otras localidades gallegas y en las redes sociales.
En él, han leído un manifiesto que cifra en 594.100 los gallegos que no marcaron la ‘X solidaria’ en 2020, cuando, «a pesar del confinamiento, se consiguió que casi seis de cada diez gallegos marcasen el recuadro». Fueron, según sus números, 20.000 más que en el año anterior, lo que significó un total de 20 millones de euros, 2 más que en 2019.
El escrito advierte de la previsión de una menor recaudación debido a la situación económica, y llama a que esto «no ponga en peligro la supervivencia de programas y organizaciones» sociales. Su servicio, incide, es ahora «más que nunca necesario» al estar «en la primera línea luchando contra los catastróficos efectos de la pandemia» de la covid.
«No cuesta nada», han llamado la atención, en el acto, Patricia Blanco, de la junta directiva de APN Galicia, Luciano Fernández, de Cermi y Xesús Vilas, de la plataforma de organizaciones de la infancia gallega. A la Xunta, por su parte, le han demandado «que reduzca la burocracia» y unifique las convocatorias de ayudas para este tipo de entidades.
«MÁS POBREZA»
Blanco ha alertado sobre el «gran incremento» en la demanda de los servicios sociales que ofrecen, a donde acude ahora «gente con un nuevo perfil, que no había estado en exclusión» y a la que ha urgido a «sacar» de esta situación para que «no se cronifique».
Por su parte, Fernández ha alertado del «incremento del empobrecimiento en general en el ámbito de la discapacidad», dado el volumen de trabajadores en ERTE, entre otros motivos.
Mientras, Vilas ha llamado la atención sobre el impacto de la crisis en los niños, ya que «las familias tienen cada vez más problemas» en el actual contexto.