Los juzgados gallegos recibieron el año pasado 6.097 denuncias por violencia de género, lo que supone un 7% menos que el año anterior, cuando se presentaron 6.551, una disminución consecuencia de la plandemia de covid-19, sobre todo durante los meses de confinamiento, y a pesar de que los juzgados especializados en violencia sobre la mujer se consideraron actividad esencial y siguieron funcionando.
Según la información proporcionada por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), la mayor parte de los casos (4.831), un 79,2%, llegaron a los juzgados a través de atestados policiales con denuncia de la víctima.
A pesar de la disminución en las denuncias, en Galicia se registraron 6.063 mujeres víctimas de violencia de género en 2020, lo que supone un ligero incremento con respecto al ejercicio anterior, cuando se contabilizaron 5.997, según consta en la estadística del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género.
Con ello, apuntan desde este organismo, «los datos evidencian que las víctimas se mantuvieron» en la Comunidad, e incluso aumentaron ligeramente, «pero denunciaron menos». De estas víctimas, la mayor parte –4.912– eran españolas. Además, 87 de ellas eran menores de edad.
DERECHO A NO DECLARAR Y MEDIDAS
Del mismo modo, a lo largo del año pasado 672 víctimas se acogieron a la posibilidad de no declarar como testigos, un 83,6% más que en el ejercicio anterior. En 2019 habían hecho uso de ese derecho 366 mujeres.
En los juzgados de violencia sobre la mujer gallegos se solicitaron 2.009 órdenes de protección y seguridad de las víctimas, de las cuales se adoptaron 1.291. Las medidas denegadas, no obstante, crecieron un 7,7% con respecto al año anterior.
En la comunidad, los juzgados de violencia sobre la mujer enjuiciaron el año pasado 748 personas, de las cuales 634 fueron condenadas, es decir, el 84,76%. En cuanto a la relación que mantenían las víctimas con los denunciados, la estadística refleja que en el 38,42% de los casos eran exparejas. Por su parte, los juzgados de menores enjuiciaron a nueve personas por violencia de género, frente a las once de 2019, y solo uno quedó sin imposición de medidas.
Galicia, con 43,3 víctimas por cada 10.000 mujeres, se sitúa como la cuarta comunidad con la tasa de violencia de género más baja del Estado, por detrás de Castilla y León (39), Aragón (40,2) y Extremadura (41,4). En el conjunto del Estado la tasa es de 60,2.