El presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de Lugo, Cheché Real, ha vuelto a reivindicar que se amplíe una hora, hasta las doce de la noche, el toque de queda, así como que se levante el cierre perimetral que todavía permanece activo en la ciudad de las murallas.
Así, ha recordado que, en la práctica, los locales están trabajando «hasta la una de la madrugada», ya que sirven cenas a domicilio. Por ello, Real reclama que la posibilidad se haga extensiva a los clientes: «A esa hora, sanitariamente, no va a tener ninguna repercusión negativa en la población, pero económicamente va a ser un punto decisivo para que la gente pueda salir a cenar», ha zanjado.
Después de que el subcomité clínico del viernes suavizase las restricciones para la hostelería lucense, Real ha acreditado que el fin de semana fue «muy bueno» para el sector en la ciudad, aunque sigue apelando a la «prudencia» y a cumplir los «protocolos» anticovid.
Finalmente, el hostelero lucense confía que esta semana se pueda levantar el «cierre perimetral» de la ciudad de Lugo, dado que, ha argumentado, «hace mucho daño a la hostelería en general, pero sobre todo al alojamiento, como hoteles, casas rurales o apartamentos turísticos».
«Los hoteles están muy tocados económicamente porque apenas tienen clientela, u ocupaciones del diez por ciento, y esto es inasumible económicamente», ha advertido. Finalmente, también ha alertado de la situación en que se encuentra el ocio nocturno, que está «muy tocado» luego de ocho meses cerrado por imposición legal.