La instalación en Vigo de la gran noria, el mercadillo navideño y las atracciones en la Plaza de Compostela y sus alrededores han quedado suspendidas después de que el concurso convocado por el Ayuntamiento hubiera quedado desierto, y como medida de precaución por la evolución de la pandemia.
Así lo ha confirmado en rueda de prensa el alcalde de la ciudad, Abel Caballero, quien ha señalado que el concurso para la instalación todos esos elementos, cuyo plazo de presentación de ofertas finalizó el pasado jueves, quedó desierto.
Según el regidor, si el gobierno local optase por sacar una nueva licitación, «seguro» que habría empresas que se presentarían, aunque ha confirmado que, dada la situación de pandemia, con el número de casos de COVID en ascenso en el área sanitaria viguesa, el Ayuntamiento actuará con «prudencia» y suspende esas actividades.
Después de haber anunciado la cancelación de las exposiciones del Belén y del Poblado Navideño (y de todos los actos bajo techo), esta suspensión supone que la campaña navideña de Vigo se ceñirá al alumbrado (cuya contratación se cerró por varios años) y, si no hay cambios, a una «cabalgata estática» de Reyes Magos.
Abel Caballero ha explicado que, en función de cómo evolucione la situación sanitaria, es probable que el acto del encendido de las luces se haga de modo virtual, vía ‘streaming’, y ha reiterado que «si los ciudadanos de España y Europa no pueden ir a Vigo, las navidades de Vigo irán a sus casas». «Es nuestro slogan, Vigo irá a las casas de la gente», ha proclamado.
Asimismo, ha recordado que se establecerán controles de aforo en las calles del centro de la ciudad, en algunas de ellas con cámaras, y la ciudad «se adaptará» a las restricciones de horarios con motivo del ‘toque de queda’