El BNG llevará esta semana al pleno del Ayuntamiento de Vigo una moción para instar al gobierno local a que retire el busto del Rey emérito de la entrada del consistorio, así como para eliminar las imágenes de Juan Carlos I de los edificios municipales e iniciar los trámites para modificar el nombre de la Praza do Rei.
Según ha trasladado el edil nacionalista, Xabier Pérez Igrexas, los comportamientos «presuntamente corruptos e inmorales» que «envuelven» al padre del actual monarca «lo único que merecen es el reproche y el rechazo democrático». «Ya lo demostramos millares de vigueses en plena pandemia, con la impresionante cacerolada del 18 de marzo», ha apostillado.
Pérez Igrexas ha subrayado que «es inconcebible que, en pleno siglo XXI, la jefatura del Estado sea asumida solo por razón de sangre, de nacimiento», y ha hecho alusión a proyecciones demoscópicas que señalan que «6 de cada 10 vigueses son partidarios de retirar el retrato de Juan Carlos I de los edificios públicos».
«Y somos mayoría los que nos decantamos por apostar por una forma de Estado republicana, frente a una monarquía anacrónica, inconsistente e insostenible, en un momento histórico como el que vivimos», ha incidido.
El concejal del BNG ha apuntado que la retirada del busto o el cambio de nombre de la plaza que hay frente al Ayuntamiento son «una cuestión simbólica, pero enormemente importante», y ha insistido en que los comportamientos que se atribuyen supuestamente a Juan Carlos I, como el «comisionismo ilegal», suponen una conducta «nada ejemplar», que «requiere una respuesta institucional».