El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha confirmado este viernes la disposición de su partido a apoyar al PP en Galicia tras las elecciones autonómicas del mes de julio para evitar un gobierno de izquierdas y promover un nuevo mandato de Alberto Núñez Feijóo, quien cree que «necesita vigilancia».
En una entrevista en EsRadio, recogida por Europa Press, Abascal ha lamentado declaraciones realizadas por el presidente de la Xunta durante los últimos meses «despreciando» a Vox, pero pese a ello ha reconocido que su formación estaría dispuesta a llegar a un acuerdo con él para impedir un gobierno «de extrema izquierda» en Galicia.
El líder de Vox ha reconocido que su partido no está en situación de ganar las elecciones autonómicas gallegas, pero en cambio sí cree que su opción de tener representación «es muy grande» y también de condicionar el futuro gobierno.
«Feijóo necesita vigilancia para no decir estas tonterías y no hablar en nombre de todos los gallegos», ha insistido tras unas declaraciones del presidente de la Xunta diciendo que a los gallegos no les gusta Vox.
CRISIS EN MURCIA
En este contexto, Abascal también ha hecho alusión a la crisis que atraviesa su partido en Murcia, donde tres de cuatro diputados regionales han sido suspendidos cautelarmente de militancia por el Comité de Garantías.
Según ha explicado, estas situaciones se deben al rápido crecimiento que tuvo que afrontar el partido debido a la sucesión de convocatorias electorales del pasado año. Sin embargo ha dejado claro que Vox siempre seguirá siendo un partido «nacional» y nunca se dividirá en federaciones ni partidos regionales diferentes en cada autonomía.