La portavoz nacional del BNG y candidata a la Presidencia de la Xunta, Ana Pontón, ha defendido que «lo más prudente» ante la situación generada por la propagación del coronavirus es el aplazamiento de las elecciones autonómicas convocadas para el 5 de abril, pero ha matizado que esta medida debería contar con «consenso» y tendría que incluir una fecha alternativa «antes del verano».
En rueda de prensa tras celebrar una reunión extraordinaria de la Executiva Nacional del BNG, Pontón ha condicionado también el aplazamiento electoral a que haya garantías de «actuación y fiscalización de la actividad del Gobierno» por parte de un poder parlamentario, en este caso la Diputación Permanente, y a que la decisión se adopte con «garantías jurídicas», puesto que ha recordado que existe «un vacío legal».
Asimismo, Pontón ha planteado la posibilidad de adelantar la reunión convocada para el próximo lunes por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, con las demás fuerzas políticas gallegas. De esta forma, ha argumentado que Feijóo ya podría participar en la reunión de presidentes prevista para este sábado por videoconferencia con una postura consultada con los agentes políticos gallegos.
En cualquier caso, si se mantiene la convocatoria para el lunes, la dirigente nacionalista ha señalado que llevará su propuesta de aplazar las elecciones del 5 de abril a ese encuentro porque entiende que «no se dan las condiciones para poder desarrollar con normalidad» un proceso electoral.
LLAMADA A LA UNIDAD
Así, apeló a la «unidad del país» y a la colaboración «entre todos» porque no es el momento de estar «en una competición política ni en el regate corto». Es más, Pontón evitó evaluar la actitud de otras fuerzas políticas e incluso las medidas adoptadas por el Gobierno gallego ante la crisis del coronavirus.
«No es el momento de la confrontación», afirmó, aunque avanzó que en la reunión del lunes el BNG planteará sus propias propuestas para afrontar la propagación del COVID-19 y dijo estar «segura» de que el Gobierno gallego «afinará» las medidas y, por ejemplo, escuchará a los profesores que demandan opciones de teletrabajo, en lugar de tener que ir a los centros educativos, pese a que estarán cerrados desde el próximo lunes.
Respecto a las condiciones que pone el BNG para decidir con «garantías» el aplazamiento electoral, Ana Pontón subrayó la necesidad de contar con un informe jurídico para ejecutar el cambio de fecha electoral porque, al ser «una situación excepcional no prevista» en la legislación vigente, cualquier ciudadano tendría capacidad de impugnar.
Asimismo, apostó por evitar el «vacío de poder» al articular vías para que el legislativo pueda «afrontar cualquier eventualidad y fiscalizar la actividad del Gobierno».
Para Ana Pontón «la prioridad» debe ser luchar contra la crisis generada por la pandemia del coronavirus, por lo que el BNG constituirá una comisión para realizar un seguimiento diario de la evolución de la crisis.
Por último, la dirigente nacionalista realizó un reconocimiento a la labor de los trabajadores de la sanidad pública y trasladó un mensaje de «solidaridad» a las personas infectadas y sus allegados.