El BNG ha organizado este martes una jornada de debate sobre vivienda para reivindicar sus políticas en este ámbito que, tal y como ha destacado la portavoz nacional, Ana Pontón, pasan, entre otras cosas, por reforzar el peso de la vivienda protegida y por aumentar la reserva de suelo para este fin.
Bajo el lema ‘Cambiar o modelo, garantir dereitos’, la jornada, celebrada en la Casa das Máquinas, ha sido inaugurada por la alcaldesa de Santiago, Goretti Sanmartín, que ha detallado algunas de las políticas en esta materia llevadas a cabo desde el Gobierno local de la capital gallega.
Entre ellas, tratar de garantizar que estas políticas se destinen a los vecinos que residen en el municipio, frente a la opción de que «vaya orientada a pisos turísticos u otros tipos de usos residenciales, apostar pos las políticas de rehabilitación y poder tener vivienda protegida en el conjunto del territorio y no que se instale en alguna de las periferias.
Además, ha reivindicado la importancia del comercio de proximidad para las ciudades, sobre lo que ha recordado que el Ejecutivo local ha aprobado una modificación del plan especial de la ciudad histórica para «poner coto a las tiendas de souvenirs».
Por su parte, Ana Pontón ha lamentado que el alquiler hoy en día supone «una carga insoportable para amplias capas de la población», especialmente, ha dicho, para la juventud.
Así, ha acusado a la Xunta de «dinamitar» la política de vivienda social en los últimos años hasta «volverla inexistente». En esta línea, ha reprochado que desde el año 2009 «ha habido años en que el número de vivienda protegida fue cero». «Y esta ha sido una decisión política», ha aseverado la líder nacionalista.
Asimismo, ha vuelto a defender que la vivienda «es un derecho», pero, sin embargo, en su opinión, «se convirtió en un bien de especulación, en Galicia, con la complicidad del PP».
«REPENSAR EL MODELO»
Por todo ello, Ana Pontón ha sostenido que «hay que repensar el modelo de vivienda pública», ya que el actual «no logra crear un modelo estable y suficiente para ofrecer alquileres a precios que la gente pueda pagar».
En Galicia, ha detallado, el parque de vivienda pública en alquiler «no llega al 1%» y está «a años luz de lo que pasa en la media del entorno europeo».
Así, ha reivindicado las propuestas del «gobierno alternativo del BNG», que pasan por «reforzar el peso y la función social de la vivienda protegida» a través de un nuevo modelo que incluya la cualificación de vivienda protegida permanente para «darle carácter estructural».
Además, ha señalado que apuestan porque «al menos el 50% de las viviendas protegidas anunciadas» tengan que ser en alquiler y «el 50%, de promoción pública», con el objetivo de «tener cada vez más mecanismos públicos para garantizar el acceso a la vivienda».
«PRECIOS ASUMIBLES Y ACCESIBLES»
Del mismo modo, ha manifestado que el Bloque considera que la vivienda protegida tenga «precios asumibles y accesibles». A este respecto, ha criticado que la Xunta «aprobó una subida del 40%», un porcentaje «desproporcionado» que hace que estas viviendas, según ha trasladado Pontón, «pasen a costar algo más de 200.000 euros». «Acaban de hacer que las rentas bajas ni siquiera puedan acceder a la vivienda por la vivienda protegida», ha criticado.
En este contexto, ha reclamado que se revise esta cuestión y que el precio se marque en base a «indicadores objetivos» y que se establezcan bonificaciones para las adjudicaciones en función de los ingresos.
Por otro lado, ha apostado por incrementar las reservas de suelo destinadas a vivienda protegida, priorizar que se actúe en lo ya construido y adquirir vivienda pública vacía. Esto, ha asegurado, permitiría «abaratar la compra por parte de la Xunta».
«Lo que no es comprensible es que la Xunta no haga nada para tratar de adquirir la vivienda ya construida a los mejores precios», ha censurado Pontón.
Y todo ello, ha apostillado, «debe ir acompañado de una mayor transparencia y planificación», haciendo público, ha añadido, «el inventario de suelo y vivienda» y «no ocultando y manipulando datos».
OTRAS MEDIDAS
Asimismo, ha recordado que estas medidas deben ir acompañadas de otras que tengan como objetivo frenar los precios del mercado libre y que, a su juicio, deben actuar sobre tres ejes: que la Xunta declare zonas de mercado residencial tensionado donde se cumpla esta condición, establecer un tope para los pisos turísticos en todo el territorio y que se pongan en marcha «políticas efectivas de movilización de vivienda vacía que contribuyan a aumentar la oferta».
En las jornadas también ha participado la arquitecta y conselleira de Vivenda en el gobierno del bipartito, Teresa Táboas, así como expertos universitarios, gestores de cooperativas y responsables de entidades que trabajan a favor de la integración social, la portavoz parlamentaria del BNG en la materia, Alexandra Fernández, y el concejal de Urbanismo e Vivenda de Santiago, Iago Lestegás.