El delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, ha considerado que desde el Ejecutivo gallego se deben «dar explicaciones» sobre el «gesto» con el conselleiro do Mar, Alfonso Villares, tras hacerse pública su dimisión al estar investigado por una presunta agresión sexual.
«No me gustó», ha dicho en relación al abrazo que recibió por parte del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, en un acto con presencia de los conselleiros y conselleiras.
«Es necesario que se den explicaciones, con independencia de la presunción de inocencia», ha aseverado al ser preguntado por esta cuestión por parte de los periodistas y después de que se supiese que el presidente de la Xunta tenía conocimiento de la denuncia a Villares en febrero.
Ha sido en una rueda de prensa para hacer balance de su gestión en estos dos años al frente de la Delegación del Gobierno y en el que ha remarcado, además, el «apoyo a las víctimas» de este tipo de delitos.