El proceso de apertura a la competencia privada de los servicios públicos ferroviarios como los Cercanías o Media Distancia de Renfe seguirán un modelo concesional similar al de los autobuses, es decir, una única empresa prestará los servicios en cada línea o ciudad concreta.
Así lo ha avanzado el secretario de Estado de Transportes y Movilidad Sostenible, José Antonio Santano, durante su intervención de una conferencia de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre la apertura del mercado ferroviario.
El ‘número dos’ del ministro Óscar Puente ha recordado que Renfe tiene un contrato vigente con el Gobierno para seguir prestando esos servicios públicos hasta diciembre de 2027, si bien hay posibilidad de prórroga de cinco años más, una ampliación que previsiblemente el Gobierno ejercerá dados los plazos burocráticos que conlleva todo ese proceso y que todavía prácticamente no se ha empezado.
Esta liberalización, así como la que ya se ha llevado a cabo en la alta velocidad (con la entrada de empresas como Ouigo e Iryo), responde a los procesos de apertura a la competencia dictados por la Unión Europea, que tienen como objetivo tumbar los monopolios europeos de las empresas públicas de transporte.
Santano ha explicado que, una vez finalice el contrato con Renfe (2027 o seguramente 2032), la competencia se dará a través de un sistema similar al de las concesiones de autobuses, en la que se convoca un concurso público, las empresas concurren y la que gana presta el servicio por el que ha pujado.
Desde Renfe siempre han dejado claro que, cuando ese proceso empiece, peleará por ganar el máximo de concesiones posible, aunque tendrá enfrente a grandes operadores como el francés (SNCF), que ya tiene una amplia experiencia en su país, o nuevos operadores como Alsa o Flix, entre otros.
ALTA VELOCIDAD HACIA EL NORTE
Respecto a la segunda fase de la liberalización, que es la que concierne a las líneas de alta velocidad que todavía no se han abierto a la competencia, Santano ha anunciado que antes del próximo mes de octubre se producirá otro hito en el proceso: la oferta de horarios a los operadores.
Con este paso, Ouigo e Iryo, y el resto de operadores que estén interesados, podrán planificar mejor su desembarco en las líneas que van hacia el Norte, principalmente a Galicia y Asturias, o a Cádiz y Huelva. En cualquier caso, estas líneas requieren de trenes que permitan adaptarse a dos tipos distintos de ancho de vía, que ahora solo tiene Renfe del fabricante Talgo.
«Espero que se concreten nuevas ofertas de operadores privados que mejorarán los servicios hacia el norte, hacia el noroeste y también hacia el sur de nuestro país», ha señalado el secretario de Estado.
COMPETENCIA ENTRE OPERADORES
No obstante, ha incidido una vez más en que la situación actual de competencia entre Renfe, Ouigo e Iryo –que libran una guerra de precios que tiene como consecuencia pérdidas económicas para los tres operadores– debe pasar a una situación de «velocidad de crucero».
«No se puede convertir en una competición de en la que solo puede quedar uno y pasar de un monopolio a otro porque se han llevado al límite las costuras financieras de las empresas, entre otras cuestiones con precios de billetes no sostenibles», ha argumentado.
Además, ha recordado que el Estado sigue soportando una gran parte de los costes del sistema, tras rebajar las tasas que cobra a los operadores para que bajen los precios o por mayores gastos de mantenimiento de las vías.