El conselleiro de Presidencia, Xustiza e Deportes, Diego Calvo, ha alertado de que la unidad de policía adscrita a Galicia sufre una cobertura de plazas «muy reducida». «Esto implica que en algún momento nos vamos a ver obligados a dejar de prestar alguna de las funciones que lleva a cabo», asegura, si el Estado no toma «algún tipo de solución» y aporta recursos.
Así lo ha afirmado en su intervención parlamentaria para exponer los presupuestos de su departamento, en donde ha remarcado que la policía autonómica tiene «un problema conocido», sobre el cual llevan semanas hablando con el delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, para «a ver si es quien de echar una mano».
Y es que avisa de que «ya no se pueden hacer más desdobles», al tiempo que «es imposible organizar los efectivos» de estos agentes «de mejor manera».
A este respecto explica que actualmente la Xunta ya cofinancia el servicio, pero critica que el Gobierno central quiere cambiar el convenio a unos términos «realmente abusivos», lo que acarrea una «situación muy grave».
Calvo reprueba que el Gobierno quiere que el Ejecutivo autonómico pague el 50% de los salarios, además de complementos y equipos. Apunta que varias comunidades han hecho ver esta problemática al Ministerio, pero «hasta día de hoy es intransigente». «No entendemos esa cerrazón del Gobierno central», espeta.
De hecho, sostiene que si la policía autonómica deja de prestar esas funciones, deberán hacerlo más agentes de la Policía Nacional o Guardia Civil, lo que conllevaría un coste «mucho mayor» para el Estado.