El Parlamento gallego ha aprobado una proposición no de ley del grupo popular, con el voto en contra del PSdeG y la abstención del BNG y Democracia Ourensana, para reclamar al Gobierno central que convoque el Consejo Territorial de Servicios Sociales de cara al análisis del impacto del proyecto de ley de familias.
Esto después de que la diputada del PPdeG Raquel Arias asegurase, en su intervención en Comisión, que existen «aspectos positivos» pero también otros «decepcionantes» al no incluirse, ha expuesto, compromisos «anunciados» por el Ejecutivo central.
Entre ellos, ha citado «la ampliación de permisos de maternidad y paternidad de 16 a 24 semanas o la nueva renta universal para la crianza de hijos hasta tres años». Las familias, ha expuesto, quedan clasificadas «en 16 tipos», vinculando algunos casos a una «decisión ideológica».
«Quedan fuera las familias numerosas», ha aseverado en una intervención en la que ha indicado que 2.000 familias monoparentales en Galicia «quedarían sin este título» y en la que ha reclamado financiación para la comunidad gallega por los criterios que «se imponen».
En un debate sin intervención del diputado de Democracia Ourensana, Armando Ojea, la socialista Silvia Longueira ha reivindicado las mejoras que, a su juicio, se introducen, pero ha insistido en el hecho de que aún se esté en la fase de «antproyecto». Mientras, ha reprochado la postura del PP y la «ausencia» de ayudas para determinado tipo de familias.
Mientras, desde el BNG la parlamentaria Ariadna Fernández ha remarcado que el «único modelo de familia que crece es el monoparental» y, en particular, ha incidido en que la mayoría son progenitores mujeres, «discriminadas» por esta condición y por ser madres, ha añadido.
También ha reprochado la «fiscalización» que, a su juicio, se hace sobre este colectivo en los requisitos que exige la Xunta para ayudas y ha apostillado que Galicia «lleva esperando por un registro de familias monoparentales desde 2011». Asimismo, pidió aumentar las familias acogedoras.