Podemos está desplegando una estrategia de rearme tras el ciclo electoral debido al momento interno complejo que atraviesa con la dimisión de varias direcciones autonómicas (Baleares, Aragón y Comunidad Valenciana y Asturias) y dos bajas en su Ejecutiva estatal.

Mientras, persiste el choque con Sumar y su afán de marcar diferencias estratégicas con el proyecto de Yolanda Díaz, como revela su demanda de interlocución directa con el PSOE de cara a la investidura.

Y en esta línea ha insistido reiteradamente en exigir su presencia en el futuro Gobierno de coalición con la continuidad de Irene Montero al frente del Ministerio de Igualdad.

La formación morada atraviesa un momento difícil después del mal resultado en las elecciones del 28M y verse desplazada como fuerza hegemónica en la izquierda alternativa al PSOE, tras el despliegue de la coalición Sumar que abandera Díaz, que le ha llevado a emprender un plan para robustecerse.

BAJAS EN SU DIRECCIÓN Y DIMISIONES EN VARIAS AUTONOMÍAS

Aparte, en las últimas semanas también ha sufrido salidas en su cúpula como la marcha de la responsable de vivienda del partido, coportavoz estatal y excandidata en la Comunidad de Madrid, Alejandra Jacinto, quien anunció que dejaba sus cargos en Podemos y volvía a ejercer su actividad como abogada en favor del derecho a la vivienda.

Jacinto, que fue fichada por el exlíder de Podemos Pablo Iglesias, para su candidatura en Madrid en los comicios de 2021 ejerció también durante la campaña electoral como portavoz de vivienda de Sumar. Partidaria de tender puentes con el nuevo proyecto de Díaz, dejó claro que pese a las discrepancias tiene claro que el partido morado era imprescindible.

Por otro lado, el 25 de septiembre también dimitió la coordinadora autonómica de Podemos Asturias, Sofía Castañón, que también dejó sus cargos en la ejecutiva (era responsable del área de cultura) y el Consejo Ciudadano estatal. Y lo hizo lamentando que el ruido insidioso» que rodeó su etapa, en referencia a la convulsa situación con el sector crítico del partido a nivel autonómico.

También el pasado mes otra de sus figuras icónicas, el cofundador de Podemos Juan Carlos Monedero dejó de presidir la Fundación República & Democracia, el ‘think tank’ del partido, y detalló que seguirá como militante «de a pie». Su lugar lo ocupa ahora el ex Jefe del Estado Mayor del Ejército Julio Rodríguez.

A su vez, los efectos de las elecciones del 28M, que supusieron un batacazo para el partido, motivó las renuncias de las direcciones regionales en Aragón, Comunidad Valenciana y Baleares. De esta forma, dejaron sus cargos las ya excoordinadores Maru Díaz, Antonia Jover y Pilar Lima.

Para suplir esta situaciones a nivel regional, el partido ha optado por conformar gestoras en estos territorios hasta la celebración de nuevas asamblea autonómicas. Y ante las bajas en su dirección, fuentes del partido han indicado que ahora Podemos prioriza su estrategia de rearme y más tarde abordará la reconfiguración de esas vacantes en su ejecutiva.

GIRA PARA ESCUCHAR A LA MILITANCIA POR TODO EL PAÍS

Para este proceso que persigue redefinir su hoja de ruta, Podemos lanzó un nuevo documento político que somete a las aportaciones de su militancia, volcada en una ruta de encuentros con su militancia con especial implicación de sus cargos estatales.

En ese gira ya se han celebrado encuentros en Cataluña, Valencia, Murcia, Cantabria, Canarias, Galicia y Cantabria, Aragón, Málaga, Extremadura, Navarra, Madrid, País Vasco, entre otros territorios.

Este proceso culminará en una conferencia política el próximo 4 de noviembre, que ahondará previsiblemente en la defensa de su autonomía política como condición esencial para futuras alianzas electorales, así como la celebración de primarias. Además y ante la irrupción de Sumar, que tiene que acometer su construcción orgánica, la formación deja claro en ese texto que no hay lugar para la doble militancia.

EL DESENCUENTRO CON SUMAR SE INTENSIFICA

La tensión con Sumar lleva meses de manifiesto después de que, pese al acuerdo para ir juntos a las elecciones del 23J, la formación morada criticó la exclusión en las listas electorales de la ministra de Igualdad, Irene Montero.

Desde entonces, Podemos ha criticado intentos de invisibilizarles, con choques tras quedarse fuera de las portavocías adjuntas del Congreso y la reciente denuncia de que Sumar vetó su propuesta de proposición no de ley en el Congreso de apoyo a Palestina, a lo que la formación de Díaz replicó que se iba a registrarse una iniciativa de forma consensuada entre los distintos partidos dentro del grupo parlamentario.

También Podemos se desmarcó del dictamen de juristas sobre la amnistía encargado por Sumar, ha cuestionado la fuerza negociadora de Díaz con el PSOE y quiere interlocución directa con el PSOE de cara a las cinco propuestas

En cualquier caso, el partido ha dejado claro que sus cinco diputados actuarán con responsabilidad de cara a la investidura aunque han reclamado de forma insistente estar presentes en el futuro Gobierno de coalición, considerando imprescindible que la ministra de Igualdad, Irene Montero, repita en el cargo para el siguiente mandato.

Esta semana la líder de la formación, Ione Belarra, ha advertido de que Sumar de que la construcción del nuevo espacio alternativo al PSOE debe mirar nítidamente a la izquierda, pues es garantía de «claridad ideológica» ante la ola reaccionaria en Europa.

De esta forma, ha recelado de cara a los próximos comicios europeos de acercamientos a los verdes europeos, días después de que la líder de Sumar participará en su cumbre organizada en Madrid si bien también participó en las jornadas que también organizó en la capital ‘The Left’ (La Izquierda) en el Parlamento europeo.