El diputado del BNG Luis Bará ha exigido este lunes a Alfonso Rueda que ejerza como presidente de la Xunta y no como «delegado del PP» para defender los intereses de Galicia en el debate abierto sobre la financiación autonómica, al tiempo que lo ha acusado a él y a su formación de «servilismo» y de tener «un doble discurso: uno aquí y otro en Madrid».
«Asistimos a una auténtica sobreactuación de Rueda, que habla para la galería, incluso con lágrimas de cocodrilo y con un enfoque electoralista», ha dicho Bará, apuntando que durante los últimos años Rueda y Núñez Feijóo «han mantenido silencio respecto del actual modelo de financiación», que es «obsoleto» y «perjudicial para Galicia».
Bará ha afirmado que la posición de la Xunta ha sido «de sumisión cuando gobierna el PP y de confrontación cuando gobierna el Partido Socialista» y ha acusado a los populares gallegos de «doble discurso» con respecto a esta cuestión.
«Cuando llegan a la Castellana les entra una especie de tembleque y abrazan el servilismo y la sumisión. Y no dicen ni pío, por ejemplo, sobre la Comunidad de Madrid, una de las grandes beneficiarias de este sistema discriminatorio para Galicia y que además creó un auténtico paraíso fiscal para atraer grandes empresas que dejan de tributar en otros territorios», ha criticado Bará.
COMISIÓN PARLAMENTARIA
En relación a la cuestión de la financiación, en el próximo periodo de sesiones, Bará ha dicho que el BNG pedirá la reactivación de la comisión parlamentaria sobre financiación autonómica, que, «lleva casi año y medio y stand by porque el PP no le interesa que haya un acuerdo».
Para una reforma del sistema, el BNG apuesta por un «modelo de concierto semejante al de Euskadi y Navarra», para que Galicia «tenga plena autonomía fiscal y financiera».
Sin renunciar a él, los nacionalistas llevan una «propuesta alternativa», un «acuerdo de mínimos» para «avanzar en la soberanía fiscal y financiera» a partir de «una negociación bilateral del Estado asentada en los pilares de la recaudación y del reparto», ha dicho Luís Bará.
En el primer ámbito, el BNG propone aumentar la recaudación mediante la cesión del 90% del IVA y del IRPF, o el incremento de gestión de otros impuestos especiales. Pide, asimismo, la cesión del impuesto de sociedades para que tributen en Galicia las empresas que desarrollan aquí su actividad productiva y un modelo fiscal «más justo y progresivo», así como desarrollar una fiscalidad medioambiental.
La alternativa de mínimos que presenta el Bloque incluye también cambios en los criterio de distribución por población ajustada, mediante el incremento de la ponderación del envejecimiento del 8,15% actual al 15%, y de la dispersión del 0,6% al 4,2%.
Otras variables a tener en cuenta, según el BNG, serían la emigración, las características del geográficas y ambientales del territorio -como los kilómetros de costa- o el hecho de tener lengua y cultura propias.
Luis Bará se ha referido, por otra parte, al debate sobre la condonación de la deuda del FLA, instando tanto a Rueda como a Feijóo a explicar por que la Xunta no acudió a este sistema de financiación pública. En todo caso, ha reclamado compensaciones para Galicia «que durante estos años acudió al mercado privado y multiplicó por tres su endeudamiento».
EL PSDEG NO VE QUE EXISTA DEBATE
Sobre el modelo de financiación autonómica, el diputado socialista Julio Torrado ha dicho que todavía no existe ningún documento sobre el que debatir y ha «agradecido» al PP que «salga ahora a decir» que el actual modelo «es bueno».
«El PP habló pestes de el modelo actual, que aprobó el gobierno Zapatero y negoció en Galicia el gobierno de Touriño», ha dicho Julio Torrado, que se ha mostrado sorprendido porque «ahora el PP intente defenderlo».
Para los socialistas, este sistema posibilitó «muchos avances» en Galicia y ha pedido a quien intente debatir uno nuevo, cuando «exista debate», que «primero demuestre estar en condiciones de defender bien a los gallegos».