La viceportavoz parlamentaria del PSdeG Begoña Rodríguez Rumbo considera los cambios anunciados en la dirección del Servizo Galego de Saúde (Sergas) y el Área Sanitaria de Pontevedra-O Salnés una «cortina de humo» y un «baile de sillas» que «no va a repercutir» en la atención al paciente.
Así ha reaccionado el Grupo Socialista a la marcha de José Flores como gerente del Sergas –para dirigir el área sanitaria de Pontevedra– y su sustitución por Estrella López-Pardo, hasta ahora directora xeral de Planificación e Reforma Sanitaria.
Es, a su juicio, un «baile de sillas» para «asegurarles su carguito» a los cesados y «dar la impresión» de que la Xunta «trabaja en agosto». La socialista asegura que el nombramiento de López-Pardo «no va a traducirse en mejoría alguna» en la situación de «colapso» en la Atención Primaria, con esperas de «dos o tres semanas» para acudir al médico de cabecera.
En este sentido, Rodríguez Rumbo se pregunta «cuántos pediatras, anestesistas o ginecólogos, entre otros», se van a contratar con estos cambios. «Ninguno», responde, ya que lo acordado el jueves es un «cambio de cromos».
Por todo ello, la viceportavoz del Grupo Socialista reclama al Gobierno gallego que se tome la sanidad «en serio» y atienda a las «necesidades» de la ciudadanía. De hecho, ha recordado la demanda hecha por el secretario xeral del PSdeG, Valentín González Formoso, para inyectar a la Atención Primaria de 140 millones de euros para poder contratar 1.000 profesionales sanitarios.