El Ayuntamiento de Santiago de Compostela ha aprobado este martes sus presupuestos del presente año 2022 gracias a la abstención durante el pleno de los grupos de Compostela Aberta y BNG, lo que ha permitido que las cuentas diseñadas por el gobierno en minoría encabezado por el socialista Xosé Sánchez Bugallo hayan salido adelante.
La sesión extraordinaria celebrada en la mañana de este martes ha supuesto la aprobación inicial de las cuentas, que ascienden a un total de 129,8 millones de euros –un 3,85% más que el pasado año– sin contar con las partidas para el Auditorio de Galicia y las empresas municipales (transportes o turismo), que dejan el total del presupuesto en 133,2 millones de euros.
Unas cuentas que han sido definidas por la concejala de Economía y Hacienda, Marta Abal, como «ambiciosas», «sensatas» y «a la altura de las necesidades» de la capital gallega que, además, suponen «la consolidación de las políticas sociales» y una apuesta por la rehabilitación viaria en zonas del rural y del casco urbano.
Como se esperaba, la abstención de Compostela Aberta y BNG permitió que los presupuestos saliesen adelante con los 10 votos (de un total de 25 ediles) del gobierno, cuyo titular, Xosé Sánchez Bugallo, ha sido criticado por los grupos que facilitaron la aprobación de las cuentas, que han coincidido en apuntar la existencia de «dos partes» en el ejecutivo local: la «absolutista» del regidor y la «abierta» al diálogo. El PP, por su parte, votó en contra.