El titular de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha terciado este jueves en la polémica suscitada a raíz de unas declaraciones realizadas por el ministro de Consumo, Alberto Garzón, sobre el sector de la carne, y ha lamentado que España tenga un presidente que «no manda en el Gobierno», antes de incidir en que Pedro Sánchez ha quedado en una «situación ridícula importante».
No en vano, a preguntas de los periodistas, el presidente gallego ha remarcado que quienes más «despiadadamente» han criticado a Garzón proceden del PSOE. Al tiempo, ha sugerido que Garzón, pese a que no ha «rectificado» sus palabras, está «simplemente blindado porque pertenece a un partido diferente» al del presidente.
Dicho esto, ha esgrimido que por lo que debería estar «preocupado» ahora el ministro de consumo es «por el precio de la luz», sobre lo que «nada se le oye», en vez de por «socavar el prestigio» de una industria, la ganadera, que «ya bastantes problemas tiene», como, precisamente, el precio de la luz, del forraje y del combustible.
«ESTAMOS ATENTANDO CONTRA LO MÁS SAGRADO»
«Estamos atentando contra lo más sagrado», ha reprobado en mandatario autonómico, en alusión a la calidad del producto cárnico español.
Convencido de que sus actos como el de Garzón evidencian que «sobran ministros y sobran ministerios», y que Consumo debería ser «una subdirección general», ha reivindicado finalmente la «saneadísima» cabaña ganadera gallega, con «una excelente» calidad de carne, al igual que la del resto de España, «que se puede comparar con ventaja con cualquier otra».
«El 76% de las granjas de vacuno de carne en Galicia tiene menos de cien animales y la media de censo por explotación son 22 cabezas de vacuno. ¿Quién está hablando de macrogranjas en Galicia?», se ha preguntado.