La mayoría de los partidos políticos con representación en el Ayuntamiento de Ourense –a excepción del PSOE– se han reunido este lunes para dialogar un cambio en la Alcaldía, jornada en la que el alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, había fijado un encuentro sobre el Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) al que solo ha asistido el BNG.
Sobre la cita convocada por su formación, el portavoz de Ciudadanos, ha señalado que el objetivo es buscar las soluciones que necesitan los vecinos a la «actual crisis municipal» y demostrar a la ciudadanía que la mayor parte de la corporación municipal tiene un planteamiento diferente «a las fantasías del alcalde» y que va a tratar «los problemas importantes de la ciudad».
Además, ha manifestado que la iniciativa surge del pleno ordinario del pasado viernes en el que, como ha recordado, afirmaron que no le darían una «foto a Jácome» y demostrarían que la oposición echa de menos hablar de temas «importantes» como, según ha indicado, es el propio PGOM.
Por su parte, la portavoz del Partido Popular, Flora Moure, ha subrayado que todos coinciden en que «el tiempo político de Jácome ha terminado» y que éste ha perdido la confianza no solo de su partido sino del resto de la corporación municipal. «Por ello entendemos que esta anómala situación no pude continuar», ha indicado. «Queremos ser parte de la solución y por ello estamos abiertos al diálogo», ha manifestado.
Sobre la posibilidad de que PP y PSOE apoyen una moción de censura, Flora Moure ha afirmado que recibieron una propuesta del PSOE y que quedaron en volver a reunirse, una cuestión que «no ha pasado». Además, ha considerado que, con su ausencia de la mesa de diálogo de este lunes, el PSOE «ya dice todo» lo que quiere por lo que, según ha indicado, los socialistas «saben cuál es la respuesta» del PP.
Por su parte, el portavoz de los socialistas, Rafael Rodríguez Villarino, ha defendido su ausencia del encuentro al recordar que en la última reunión su formación ya propuso que gobernase la lista más votada. También ha asegurado que el PP quedó en darles una respuesta para después remitirla a Santiago pero, al no haber recibido contestación, ha asegurado entender que «no tiene sentido esta reunión».
Así las cosas, ha afirmado que el PSOE tendrá mañana una reunión para analizar las acciones «a desarrollar», que incluirán un calendario y un cronograma para reunirse con todos los contactos.
Por su parte, el BNG ha subrayado que su formación ya expuso con claridad que es lo que se necesita para solventar la situación municipal y que, a juicio de los nacionalistas, pasa por «una moción de censura» y que «gobierne la lista más votada», tal y como señaló en último pleno municipal el portavoz del Bloque, Luis Seara.
Por último, Miguel Caride, de Democracia Ourensana, ha destacado que lo que debe «primar» es el «espíritu de los 24», donde 24 de los 27 concejales solicitaron la dimisión de Jácome. De este modo, ha apelado a «renunciar a las siglas y sentarse a hablar para llegar a una solución». Con todo, ha asegurado que esta solvencia no parte de un gobierno de minoría sino que «lo que se necesita es estabilidad» y «un reparto de áreas donde todos podamos contribuir».
Por su parte, preguntado por la crisis municipal, el presidente de la Diputación de Ourense, Manuel Baltar, ha manifestado «los concejales y las concejalas son las que tienen la palabra» porque son los que pueden «realizar las iniciativas del ayuntamiento de Ourense» así que ha considerado que habrá que esperar «a ver que sale de las reuniones, porque en los foros es donde se toman estas decisiones».
PLANTÓN A JÁCOME
A la misma hora que la reunión de portavoces tenía lugar en el Liceo de Ourense, el alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, tenía programada una reunión para tratar el Plan General de Ordenación Municipal y una hora más tarde una reunión sobre la nueva ordenanza de veladores.
A ambas, a pesar de estar convocados todos los partidos, únicamente acudió el BNG por lo que Jácome les demanda «responsabilidades». «Todos tenemos unos puestos, yo como alcalde y ellos como oposición», ha manifestado el regidor, que ha tachado de «irresponsabilidad» el hecho de no acudir a una convocatoria para tratar «un tema clave».
Jácome ha subrayado que Democracia Ourense «nunca dejó de acudir a las reuniones del PXOM» y que, desde el gobierno municipal, «participaron en 10 reuniones con el Partido Popular para avanzar en el documento».
Es por ello, que asegura que seguirán convocando reuniones y «trabajando en la hoja de ruta» y que, si después hay que llevarlo a pleno, serán los ciudadanos los que deberán juzgar «si esta gente elude responsabilidades o no».
«TOMADURA DE PELO»
Sin embargo, el PP considera que la llamada de Jácome «al consenso con el PXOM» se trata de «una tomadura de pelo» y ha recordado que el alcalde tenía bloqueado este proyecto desde el pasado mes de octubre a pesar de los informes favorables «por sus delirios sobre pelotazos inexistentes».
De este modo, han dejado claro que «no acudirán a ninguna farsa orquestada por el regidor actual» con la única intención de desviar la atención sobre lo que importa en la ciudad, «la grave situación de gobernabilidad».
En la misma línea se han mostrado Ciudadanos y el PSOE al señalar que sus ausencias se deben a que la oposición quiso mantener estas conversaciones tiempo atrás y fue el regidor quien no lo facilitó, por tanto «ahora lo principal es solucionar la crisis municipal».
Quien sí asistió tanto a la mesa de diálogo de Ciudadanos como a la reunión sobre el PXOM de Jácome fue el Bloque Nacionalista Gallego aunque poniendo de manifiesto que «es el alcalde porque así lo quiere el PP».

