El presidente de la Xunta y candidato del PPdeG a la reelección, Alberto Núñez Feijóo, ha ironizado con el «bombardeo de ministros» en la Comunidad durante la campaña electoral para el 12 de julio, al tiempo que ha minimizado que la portavoz de su partido en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, no haya participado en actos electorales del PPdeG como sí han hecho otros dirigentes como Pablo Casado, Mariano Rajoy, Ana Pastor, Esteban González Pons o Juan Manuel Moreno.
En un encuentro telemático organizado por Nueva Economía Fórum, Feijóo ha restado importancia a la ausencia de Cayetana Álvarez de Toledo y ha incidido en que nadie le ha preguntado por el hecho de que no haya acudido a la Comunidad el portavoz de los populares en el Senado, Javier Maroto.
«En Galicia, los portavoces del grupo parlamentario no vienen a las campañas», ha dicho el aspirante popular, quien ha incidido en que lo que desean conocer los gallegos antes de ir a las urnas es «el programa» con el que concurre el partido en Galicia.
Tras asegurar que le parece «bastante anecdótico» que participen o no en su campaña los portavoces del Congreso o del Senado, se ha referido a Álvarez de Toledo para asegurar que no tiene «ningún planteamiento en su contra». De hecho, ha asegurado que «conocimiento, valentía y criterio no se le pueden negar».
«Es la portavoz elegida por el presidente (Pablo Casado) y es mi portavoz», ha aseverado.
«BOMBARDEO DE MINISTROS»
En el polo opuesto, ha criticado el «bombardeo de ministros» que han visitado Galicia en los últimos días «después de no venir en dos años» y, en las ocasiones en las que han acudido a la Comunidad, «no hablar» con el presidente. De hecho, ha apuntado que no ha habido encuentros más allá de «coincidencias» en algún acto.
En todo caso, Feijóo se ha declarado «encantado» de que los ministros o el presidente del Gobierno, el socialista Pedro Sánchez, se desplacen a Galicia y «den cuenta de lo hecho, que se puede describir en medio segundo».
ENCUESTAS Y VOTO TRANSVERSAL
En su intervención, el presidente ha insistido en el mensaje de que no hay que confiarse en las encuestas. «Es muy probable que el PP vuelva a ganar, pero somos absolutamente prudentes sobre una cuarta y consecutiva mayoría absoluta, vamos a ver si lo conseguimos», ha reflexionado, antes de incidir en las incertidumbres ligadas a la pandemia.
«No sabemos cuál va a ser el porcentaje de participación», ha dicho, antes de restar importancia a la polémica sobre la ocultación de siglas en sus carteles. «Si fuese un especialista en márketing, felicitaría al PP porque hemos conseguido que todo el mundo hable de las siglas, del PP. Y en Galicia no existe nadie que no sepa que soy del PP, que mi nombre y mi apellido están ligados a él desde hace 14 años como presidente del partido en Galicia y, desde hace 11, como presidente de la Xunta», ha esgrimido.
Dicho esto, ha defendido que las siglas tienen el «mismo» tamaño que en anteriores convocatorias –tanto su apellido como ‘Galicia’ ocupan desde hace años un mayor espacio en la cartelería e imagen gráfica que PP– y lo ha atribuido a que él se presenta como «un presidente de la Xunta y no accidental, un presidente en el que los gallegos han confiado 11 años consecutivos», y con el compromiso de gobernar para «todos».
«Mi programa electoral, posicionamiento, discurso y candidatura no es solo de un partido, sino que es un punto de encuentro de centenares de miles de gallegos que creen que lo mejor es tener un gobierno acreditado», ha dicho, antes de apelar al voto transversal.
No en vano, se ha mostrado convencido de que si no logra el apoyo «de votantes del PSOE en municipales, europeas o generales», no podrá obtener «la mayoría suficiente». «Es mi rol, pero no ahora, no hay nada nuevo salvo mi compromiso de ser el presidente de la mayoría de los gallegos (…) Para mí la prioridad es Galicia y después mi partido. El PPdeG es un instrumento a favor de un pueblo y yo quiero ser presidente de la mayoría de los gallegos, también de los que no saben a quién votar», ha sentenciado.
«OPOSICIÓN A LA OPOSICIÓN» EN ESPAÑA
En cuanto a la relación entre el Gobierno y el PP en España, Feijóo ha esgrimido que «en España hay dos oposiciones, una oposición a la oposición que capitanea el Gobierno», y una «oposición imprescindible desde un punto de vista del control democrático».
Del Gobierno ha recordado que ha salido «de movimientos de crispación social» y ha aludido al 15M para señalar que ahora, «las personas que estaban en tiendas de campaña en Sol están en la Moncloa», por lo que son dirigentes que «conocen bien la agitación».
Así, ha censurado que el Gobierno «no dé una tregua» a la oposición, bajo su punto de vista con especial intensidad al PP, mientras le ha pedido «firmar cheques en blanco» durante la pandemia. «Yo informaba a Pablo Casado porque no le informaba el presidente del Gobierno, luego le pedía cheques en blanco y, si no se los firmaba, no era un buen patriota», ha reflexionado.
Por todo ello, ha asegurado que no puede «aceptar» que la oposición del PP «sea excesiva».
LA DIFICULTAD DE UNA MAYORÍA ABSOLUTA EN ESPAÑA
Finalmente, ha incidido en que ya le gustaría que se pudiese «sacar mayoría en España», pero ha incidido en que la coyuntura política es «distinta» a la gallega.
«España es una nación muy compleja, con partes del territorio con una orientación y otras con otra, no es muy compatible con la mayoría absoluta. Alguna sacó el PSOE y nosotros otras, pero no son fáciles de conseguir», ha zanjado.