El delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, ha reivindicado el reconocimiento a quienes fueron perseguidos por la dictadura franquista como un «deber democrático y moral, un compromiso de no repetición y de justicia».
Lo ha hecho durante la entrega de la Declaración de Reconocimiento y Reparación Personal en memoria de José Esperante París, conocido como ‘Che de Pedro’, vecino de Mazaricos asesinado durante la dictadura, y a instancias del Instituto Gallego de Tierras Comunitarias (Ingateco), que promovió la solicitud de esta distinción. Al acto, celebrado en la Delegación del Gobierno, también ha asistido el subdelegado en la provincia de A Coruña, Julio Abalde.
Esperante París era un labrador vecino de la parroquia de Eirón, en el municipio coruñés de Mazaricos, asesinado el 22 de enero de 1963 por disparos de la Guardia Civil. Sucedió cuando, junto con otros vecinos y vecinas, defendía el monte vecinal frente a la incautación que pretendía el régimen franquista para repoblación forestal, según apunta la Delegación del Gobierno.
«La Ley de Memoria Democrática trata de dar cumplida satisfacción a los familiares de las víctimas del franquismo sin abrir ningún tipo de herida sino cerrándolas», ha recalcado Blanco tras incidir en que el homenajeado «padeció persecución por razones políticas e ideológicas».
«Todo lo que hoy tenemos, la libertad de movimiento, la igualdad, la libertad de opinión y de expresión fue ganado por personas como ‘Che de Pedro’ y otros miles que lucharon por la libertad», ha expuesto.
Asimismo, el delegado ha señalado que es «fundamental este tipo de actos» para «reparar a las víctimas y sus familias y poner en valor lo que hicieron personas anónimas» y para recordar que la dictadura franquista fue «una época oscura, de retroceso y ausencia de libertades». «Hay que mirar para atrás para que estos errores no se repitan», ha insistido.
En la misma línea, el presidente de Ingateco, Claudio Quintillán, durante su intervención, ha resaltado la importancia de estudiar «a fondo» lo que significó la lucha de los labradores durante ese período. «Algo que merecía ser conocido y sirve para aprender», ha apostillado.

