El sindicato CIG-Ensino acusa a la Xunta de una actitud «dictatorial» y de querer «controlar» a profesores y alumnos con la ‘neutralidad ideológica’ que este miércoles anunció que incluirán las instrucciones de organización del próximo curso.
«Estamos ante una Administración que es reaccionaria y está reforzando su carácter reaccionario. Lo que está pasando en la CRTVG es un ejemplo palmario de gente dictatorial que quiere controlar todo aquello que puede, y en la enseñanza pública va en esa misma línea», ha criticado Suso Bermello.
Por su parte, Laura Arroxo ha censurado que «está totalmente fuera de lugar», ya que los centros «tienen que tener libertad para hacer las actividades que consideren».
En concreto, la Consellería de Educación, Ciencia, Universidades e FP presentó este miércoles ante la junta autonómica de directores las instrucciones de organización del próximo curso, entre las que ha incluido la «defensa de los valores constitucionales, la neutralidad ideológica, el pluralismo social y el pensamiento crítico» en las actividades de los centros para garantizar «la convivencia interna» y «el buen clima».
«Lo que dicen ellos que es la neutralidad ideológica», ha matizado Arroxo en rueda de prensa, a preguntas de los medios de comunicación sobre este anuncio.
Al respecto, ha mostrado su rechazo a que «la trampa con la que juegan» sea la programación anual global y, en este sentido, ha advertido de que este «tiene que ser un documento dinámico», por lo que debe ir «sufriendo cambios». «No queremos que lo usen como excusa y como no te gusta (la actividad), no la puedo introducir», ha incidido.
Arroxo ha subrayado que «los centros tienen que educar y es labor» de los profesores «crear personas con pensamiento crítico». «Cualquier instrucción que vaya contra eso está desde luego… no sé si ilegal, habrá que verlo, pero fuera de lugar», ha resuelto.
UCRANIA
Cuestionada por el ejemplo de actividades complementarias que se puedan estar desarrollando en institutos sobre la guerra de Ucrania, Laura Arroxo ha apuntado a «muchas relacionadas con el Día de la Paz» y ha evidenciado que «hablar de la paz, sea en Ucrania o cualquier territorio, es algo lógico».
A mayores, ha seguido con el ejemplo para señalar que «si hay que hacer crítica» sobre «cómo se enfocan ciertas noticias en los medios de comunicación, también es lícito». «Creo está totalmente avalado», ha añadido, sobre un ejercicio que ve «pedagógico».
«Son las actividades que se pueden estar realizando… Si un centro está denunciando el asesinato de miles de niños, no sé dónde está el perfil ideológico. Nuestros jóvenes no pueden ser ajenos. Es función de los docentes hablar de esa realidad. No podemos tenerlos ajenos a lo que está pasando en el mundo. Eso sí sería contraproducente», ha remarcado.
«NO NOS VAN A CALLAR LA BOCA»
Por su parte, Suso Bermello ha avisado de que no les van «a callar la boca» y ha apuntado a «lo que pasó en Redondela» con una muestra que se hace con restos de basura –‘Artelixo’– que «este año se transformó en Altrilixo».
«Si lo que va a pretender –la consellería– es que cualquier crítica que haya, como Altri, o algunas inspecciones por directrices claras de cargos que ordenaron retirar fajas o banderas de Palestina… Si lo que hay que ser es equidistante en un genocidio no lo vamos a ser. No nos van a callar la boca», ha subrayado, para agregar que «si quieren abran expediente».
En esta línea, ha considerado que «pretenden un comisariado político que dictamine que es lo que se puede y lo que no se puede impartir» y ha ahondado en la idea de que la programación global debe ser «dinámica».
No obstante, ha reprochado, Galicia está a su juicio «gobernada por burócratas que llevan muchísimo tiempo sin pisar un aula y que quieren controlar al profesorado y la formación del alumnado».
Ante esto, ha insistido en que CIG-Ensino se va a «oponer a cualquier tipo de ingerencia política» y que, en su opinión, sería «una muestra de inhumanidad» ser «equidistantes ante el nazismo» o «neutrales ante el genocidio sionista».
BIOLOGÍA EN SELECTIVIDAD
Por otra parte, sobre la polémica surgida en las pruebas de acceso a la universidad, Arroxo se ha limitado a constatar que no tienen «más noticias» acerca de la reclamación de profesores de biología por una prueba que consideraron «especialmente difícil».
Entiende que será «para que se anulen esas preguntas», de modo «que no haya que hacer más», pero también interpreta que «dependerá de la valoración» que se haga de dicha queja.