La CIG-Ensino ha presentado este jueves sus candidaturas para optar a las próximas elecciones sindicales en la enseñanza pública no universitaria, convocadas para el próximo 1 de diciembre, donde esperan revalidar como principal fuerza, al igual que hace cuatro años.
Bajo el lema ‘Coa túa forza’, la formación presenta cuatro candidaturas provinciales compuestas por 963 personas –el 62% mujeres– de distintos tipos de centros, ámbito rural y urbano y grado de experiencia laboral, con el objetivo de recoger la «pluralidad del profesorado», ha dicho el secretario nacional, Suso Bermello (número 1 por A Coruña), que ha comparecido acompañado de las cabezas de lista de Lugo (Laura Arrojo), Ourense (Elena Añel) y Pontevedra (Maruxa Martínez).
«Buscamos que ningún perfil de profesorado ni de centro se quede fuera de nuestras candidaturas, con el objetivo de que sean un reflejo de la propia realidad del personal docente», ha añadido Bermello.
El objetivo de la CIG es «continuar siendo la voz mayoritaria del profesorado gallego», como ocurrió hace cuatro años, cuando se hicieron con el 42% de los votos. En esta ocasión, están llamados a votar más de 33.000 docentes, que elegirán a 146 delegados, cuatro más que en la anterior ocasión.
Precisamente sobre esta cuestión, Bermello ha clamado contra la «infrarrepresentación» del ámbito educativo público, con una cifra de delegados muy inferior al sector privado.
En concreto, ha puesto como ejemplo que los 146 delegados que elegirán los 1.200 centros educativos públicos de Galicia son la misma cifra que tienen menos de 20 centros privados.
PROGRAMA ELECTORAL
Entre los elementos que CIG Ensino lleva en su programa electoral, Suso Bermello ha destacado la necesidad de «frenar los recortes de personal» educativo, una disminución que, ha dicho, afecta de forma particular a cuestiones como la atención a la diversidad o las unidades rurales.
También exigen la bajada de las ratios en todas las etapas educativas, una cuestión que «se ha evidenciado como el mejor antídoto contra todos los problemas en las aulas»; y la recuperación de «los derechos arrebatados» al sector en «la etapa de Núñez Feijóo» al frente de la Xunta, principalmente en lo relativo a la vuelta al horario lectivo de 18 horas en secundaria y 21 en primaria.
Dentro del programa electoral, la CIG también propugna por «eliminar la burocracia inútil y fomentar la autonomía de los centros y del profesorado a la hora de diseñar contenidos» y por apostar por la enseñanza pública, gratuita, laica, inclusiva y feminista.
En el ámbito laboral, Suso Bermello ha destacado cuestiones como la necesidad de recuperar el poder adquisitivo por parte de los docentes y «garantizar unos salarios dignos» dentro de un contexto inflacionista, así como negociar una carrera profesional que se encamine hacia un cuerpo único docente.
Del mismo modo, el sindicato quiere eliminar la tasa de reposición para «ampliar los actuales cuadros de personal» y garantizar la estabilidad de los interinos y sustitutos, reforzar el modelo de formación del profesorado.
En cuanto a los centros, Suso Bermello ha destacado la lucha de la CIG contra la privatización y el incremento de los conciertos educativos en etapas como FP y ha avanzado la intención del sindicato de recurrir estos acuerdos si, en el año 2023, se renueva la financiación a los centros que segregan alumnos, algo que no permite la Lomloe.
Finalmente, reclaman la derogación del Decreto del Plurilingüismo y su sustitución por un modelo de normalización de la enseñanza que revierta la «actual situación» de «desgalleguización» del alumnado.