Las farmacias de siete municipios ourensanos que participan en un cribado de Covid-19 en la provincia –Ourense, Barbadás, O Carballiño, Verín, O Barco, Boborás y O Irixo– alcanzan el millar de test serológicos realizados, al tiempo que destacan la «acogida excelente».
Así lo ha destacado, en declaraciones a Europa Press, el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Ourense, Santiago Leyes Vence, quien ha incidido en que las farmacias participantes, medio centenar adheridas hasta la fecha, «están recibiendo muchas llamadas» para pedir cita para hacer la prueba.
«Ha sido una medida exitosa para ayudar para luchar contra la pandemia», ha valorado el presidente de los farmacéuticos ourensanos, quien ha asegurado que las farmacias «colaboran muy activamente».
Leyes Vence ha reconocido que «ha habido casos positivos» entre los test realizados en farmacias, pero ha explicado que, por protección de datos, no puede concretar información al respecto, ya que se trata de documentación «confidencial» que se comunica a la Consellería de Sanidade directamente.
Por todo ello, ha reiterado que la población «no se preocupe por los tiempos», porque «se le hará el test a quien quiera». Así, ha remarcado que hasta la fecha «el balance es positivo» en relación a este cribado en el que colaboran las farmacias, que ha tenido una «acogida excelente». SATSE
Por su parte, el Sindicato de Enfermería (Satse) alerta de que las oficinas de farmacia que realicen test para detectar el Covid-19 a los ciudadanos de la provincia de Ourense «pueden convertirse en un verdadero y preocupante foco de contagio y transmisión del virus» al, puntualiza, «coincidir en espacios cerrados y con escasa ventilación natural, personas sanas con personas presuntamente infectadas por el virus y con capacidad de contagiar a otras en las mismas farmacias, dada la falta de medidas de seguridad para realizar la prueba en dichos espacios».
De este modo, Satse afirma que los test que den positivo o negativo, «si no han sido realizados adecuadamente o incluso atendiendo al margen de error que los mismos conllevan, pueden generar incertidumbre e inseguridad en los ciudadanos».
«Con cierta angustia intentarán resolver la situación, y lo harán acudiendo al centro de salud, a pesar de que no presenten cuadro clínico alguno, pues no podemos olvidar que la prueba diagnóstica la ha solicitado el individuo por voluntad propia, sin criterio clínico y sin participación alguna de los profesionales Médicos y de Enfermería de la Sanidad Pública», advierte Satse.
El Sindicato de Enfermería ha lamentado «la falta de formación clínica de los farmacéuticos», ya que «solo tienen competencia en materia de medicamentos», incide. «Realizarse un test Covid en una farmacia se puede convertir en una mera curiosidad personal, o lo que es peor, frivolizándolo de tal manera que se convierta en un acto de rutina ciudadana, al igual que lo puede ser ir a comprar el pan», critica.
Para concluir Satse asegura que utilizará «todas las medidas jurídicas, sindicales y sociales a su alcance» para «corregir y resolver la decisión irresponsable y carente de rigor sanitario del conselleiro de Sanidade de la Xunta de Galicia», Julio García Comesaña.