Decenas de personas se han vuelto a manifestar este jueves por las calles de Vigo, convocadas por la CIG, para exigir medidas que pongan fin a la «crisis» de la industria naval en la comarca, y para reclamar la «implicación» de la Xunta en un sector en el que sus principales astilleros, Barreras y Vulcano, se enfrentan a un futuro incierto.
En la marcha, que ha salido a mediodía de la puerta principal de Hijos de J. Barreras, ha participado el secretario xeral de la CIG, Paulo Carril, quien ha denunciado la «crisis industrial» que vive Galicia y que, en el sur, se evidencia en la situación de empresas como Barreras, que acaba de esquivar el concurso de acreedores gracias a un acuerdo de refinanciación para acabar el barco de la armadora de Ritz Carlton, pero que no ha concretado nueva carga de trabajo.
Así, Carril ha atribuido la situación a una «pésima gestión empresarial» y a la «pasividad» de la Xunta, y ha recordado que «falta un plan real de viabilidad para dar carga de trabajo y futuro» al emblemático astillero.
Además, el responsable de la CIG ha incidido en que cualquier acción que se tome en este ámbito debe pasar por que la Xunta «tome parte activa» y «haga pública» esta empresa, «que es lo que va a garantizar el futuro».
En la misma línea, el candidato del BNG en la lista por Pontevedra, Luís Bará, ha reclamado también la intervención pública del astillero Barreras por parte del gobierno gallego. Bará ha pedido al próximo gobierno de la Xunta «un plan industrial para el área de Vigo, que tenga como pilar fundamental el naval», convocar la mesa del naval, e impulsar el gran proyecto del centro de reparaciones, que podría ubicarse en las instalaciones de Vulcano (en fase de liquidación).