El grupo pizarrero Irosa-Samaca y la Comunidad de Montes Portela Trigal han llegado este martes a un acuerdo para poner fin al litigio por la propiedad del suelo que impedía la actividad de la empresa y, con ello, mantener los mas de 200 puestos de trabajo.
Para ello, han sido necesarias cuatro reuniones, hasta esta última en la contaron con la presencia del alcalde de O Barco de Valdeorras, Alfredo García, como intermediario.
En la primera reunión, celebrada a mediados de septiembre, hubo una toma de contacto y un acercamiento de posiciones. En las tres siguientes, se avanzó progresivamente hasta llegar al preacuerdo del pasado día 10, en el que ya se garantizaba la permanencia de los puestos de trabajo.
Ahora, en el documento firmado por representantes de la empresa y de la comunidad de montes, se contemplan dos soluciones, una por cada una de las posibilidades esperadas en la resolución definitiva del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia del expediente de expropiación.
Si el TSXG da la razón a los comuneros, la empresa podrá alquilar el suelo durante los próximos once años, prorrogables, para la actividad. Si la sentencia es favorable para Irosa Samaca, esta podrá trabajar indefinidamente.
El acuerdo se firma con el compromiso de que ninguna de las dos partes pueda recurrir la sentencia, salga favorable para quien salga.Con este acuerdo solicitarán al juzgado que se ponga fin al desahucio programado para el día 29 de noviembre y que se dé, de este modo, continuidad a la empresa por mínimo otros once años.
Tanto las partes implicadas como el alcalde de O Barco de Valdeorras, Alfredo García, mostraron su satisfacción por el acuerdo y especialmente por lo que supone para que la empresa mantenga su actividad y los puestos de trabajo, doscientos directos y casi otros cien de modo indirecto.