La Confederación Intersindical Galega (CIG) ha reiterado su demanda de incrementar el salario mínimo interprofesional (SMI) hasta los 1.212 euros, lo que supondría una subida de más del 21% para alcanzar el 60% del salario medio español, como recomienda la Carta Social Europea.
«Ante la inminente subida del salario mínimo por parte de los sindicatos estatales y del gobierno y la patronal, la CIG reitera que la única cuantía admisible es la de 1.212 euros», ha reivindicado la organización sindical en un comunicado, que sitúa el salado medio español de 2022 en 28.301 euros.
Según el secretario confederal de Empleo de la GIC, Francisco González Sío, el cálculo de esta cifra es el resultado del módulo salarial que realiza el Ministerio de Hacienda cruzando los ingresos de los trabajadores con datos de la Tesorería de la Seguridad Social «no como hace el grupo de expertos del Gobierno que emplea encuestas y no datos de ingresos reales».
Para él, equiparar el SMI a la Carta Social Europea «significa quitar de las rentas del capital hacia las rentas del trabajo y, por lo tanto, mejorar las condiciones de vida de decenas de miles de trabajadores gallegos».
González Sío ha subrayado que «está demostrado» que subir el SMI no crea desempleo, sino que, por lo contrario, «reactiva la economía». «Ya está bien, la adhesión a la Carta Social Europea en su versión más actualizada no puede quedar en un simple acto simbólico. El Gobierno no puede estar incumpliendo sistemáticamente», ha sentenciado.