El pleno de la Cámara gallega, que este miércoles ha estado marcado por varios tensos debates entre miembros del Gobierno y de la oposición, ha albergado un nuevo rifirrafe con las elecciones municipales de fondo a seis meses de la cita, en este caso, a cuenta del Plan Hurbe de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda que dirige Ángeles Vázquez.
Este plan Hurbe constituye un programa para financiar obras de los ayuntamientos con cargo a este crédito extraordinario, para el cual, ha destacado la conselleira, es necesario que los ayuntamientos «presenten un proyecto» y cuando es «bueno» y cumple las condiciones, cuentan con la financiación.
Sin embargo, el diputado del BNG Luís Bará ha arremetido contra lo que ha denominado «malversación moral» de los fondos y ha denunciado que «de 62 proyectos» que se han financiado, «61» se corresponden con ayuntamientos gobernados por el PP según los datos del portal de transparencia en cuanto a los contratos desde septiembre de 2020. Esto le ha llevado a ironizar con que en lugar del plan Hurbe, debería ser «plan urde» de «urdir» contratos.
«No mira colores, mira ciudadanos», ha subrayado en referencia a la Xunta la conselleira Ángeles Vázquez, quien ha sostenido que en esos municipios gobernados por el PP «habrá gente que no vota (a los populares) y no por eso deja de bañarse en la piscina o deja de andar por la calle».
«Lo que hacen ustedes es un escándalo, indecente, un abuso que vamos a denunciar una y otra vez; no nos vamos a cansar, no vamos a callar sobre este uso discrecional, discriminatorio y partidista. Son fondos públicos, no del PP», ha enfatizado Luís Bará, quien ha propuesto a la conselleira pactar una ley gallega para el reparto de fondos, «gobierne quien gobierne» para evitar el «auténtico festín de uso de los fondos públicos».
TIENEN QUE SOLICITARLO
Ángeles Vázquez ha asegurado que se lleva a cabo el convenio cuando «un ayuntamiento cumple estrictamente». «Si uno lo solicita y otros no, la conselleira y la Xunta no pueden resolver ese problema», ha contestado la conselleira, quien ha reivindicado que el Gobierno gallego «tiene en como prioridad la colaboración con los ayuntamientos».
Así las cosas, la conselleira de Vivenda ha remarcado los 163 millones de euros en la última década, con 410 actuaciones y ha comprometido su apuesta por las entidades locales, porque «lo precisan». Así, la Xunta aumentará en un 23 por ciento los planes Hurbe, hasta alcanzar 8,3 millones de euros en las próximas cuentas.
Luís Bará ha denunciado que ayuntamientos como el de Moaña y Bueu no tienen este convenio y ha recriminado que se les haya «negado», pero la conselleira de Vivenda afirma que no tiene encima de su mesa de su despacho ningún proyecto concreto de estos municipios. El diputado nacionalista insinuó que tenían que «pasar la humillación de pedirle el favor a ver si le dan un convenio», algo «no democrático»; frente a lo que Ángeles Vázquez contestó que no tienen que ir «de rodillas» y que, a diferencia «del bipartito», ella «sí» recibe a los alcaldes.
«Tiene que llegar la democracia (al reparto de fondos) y en concreto al plan Hurbe», ha reclamado Bará, a quien la conselleira que la Xunta no puede «hacer una obra si no tiene un proyecto», «Digan que hagan buenos proyectos y seguro que vana tener el convenio asegurado», ha sentenciado.
FONDOS FORMACIÓN EMPLEO
Por otro lado, en respuesta a la diputada socialista Carmen Dacosta, la conselleira de Promoción do Emprego, María Jesús Lorenzana, ha explicado que en el año 2023 se incrementará el presupuesto destinado a formación para empleo y orientación laboral en un 9,6%.
En este sentido, anunció que se sumarán otros 15 millones de euros más –sin precisar cómo se van a incorporar– a los 50 millones anunciados para formación de desocupados, los que se avanzaron en la presentación de los presupuestos. Del total de 202,2 millones, un total de 104 se invertirá en el Plan gallego de formación para empleo.