La reunión entre la dirección de Vestas y el comité de empresa de la planta de Viveiro (Lugo) ha concluido este jueves sin avances y con una nueva fecha en el calendario: el próximo viernes 22, a menos de una semana de que (el 28) concluya el periodo de negociación del expediente de regulación de empleo (ERE) extintivo para toda la plantilla, compuesta por 115 trabajadores.
Por su parte, el presidente del comité, David Mariño, ha lamentado no contar con «el más mínimo avance», ya que a su juicio la empresa «solo quiere cumplir etapas del proceso para cumplir con la ley».
Los representantes de los trabajadores, mientras, quieren «que se paren a negociar de verdad», sin el reloj del ERE «corriendo». Sin embargo, «lo único que avanza sin parar es el reloj», lamentan.
La plantilla exige, con todo, «que se busque una solución para el mantenimiento de la totalidad de los puestos de trabajo» y así se lo transmitió a la dirección. Apela en este sentido al compromiso por parte de la Xunta de «buscar un inversor que se interese en adquirir la empresa y a sus empleados».
DOS MESAS
Por su parte, fuentes de la empresa subrayan a Europa Press la participación en dos mesas, la de negociación del ERE pero también la constituida por la Xunta para la búsqueda de una solución industrial al cierre, esta última «totalmente voluntaria».
Este extremo, según estas fuentes, «demuestra el compromiso» de Vestas «con el diálogo», y la intención de «buscar la mejor solución para todos», para lo que ofreció alternativas laborales a los operarios, y por lo que rechaza que exista «mala fe» en el proceso negociador.