El presidente de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG), Juan Manuel Vieites, defiende que «no es el momento procesal oportuno, como dicen los jurídicos, para abordar» una subida del salario mínimo interprofesional (SMI). Por su parte, la conselleira de Emprego, María Jesús Lorenzana, advierte de que: «Es fundamental que, en la situación de recuperación en la que estamos, exista consista un consenso mayoritario».
Así se han expresado ambos este miércoles, a preguntas de la prensa –durante la presentación en Santiago de un foro de emprendimiento femenino–, después de que la vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, haya afirmado que en septiembre se verá si es posible recuperar la senda de subida del salario mínimo en la que el país se encontraba antes de la llegada de la pandemia.
Al respecto, Vieites aboga por, «primero, recuperar al país de la situación socieconómica» ante el impacto de la pandemia. «A partir de ahí», sostiene, a través del «consenso y diálogo social» se podrá, «seguramente», «llegar a algún tipo de acuerdo».
Remarca que hay que priorizar centrarse en las empresas que «lo están pasando mal», pues subraya que «hay un montón de ERTE aún en marcha». Sobre este extremo, el presidente de los empresarios gallegos considera que impulsar un alza del salario mínimo «de manera unilateral desde el Gobierno no es buena mecánica», pues «lo único que puede producir es que en vez de favorecer, perjudica».
Por ello, incide en abordar esta cuestión «desde el diálogo social». «Siempre que las condiciones y el marco sea el adecuado, nosotros estaremos encantados», deja claro.
POSTURA DE LA XUNTA
La conselleira de Emprego recuerda que las condiciones para subir el SMI están fijadas en el Estatuto de los Trabajadores, de forma que se necesita que «se cumplan las necesidades económicas necesarias para subir el salario», al tiempo que pide que se haga en el seno del diálogo social.
Lorenzana señala que «no existe trabajo sin empresa», por lo que es necesario tener en cuenta las «condiciones generales de la economía». Así, apela al consenso entre empresarios, sindicatos y administraciones para acometer esa subida del SMI.