Parte de los hosteleros de Ourense se muestran dispuestos «a no acatar» las normas de la Xunta en relación con las restricciones por el coronavirus, pues consideran que son desmedidas para poder llevar a cabo su labor.
El pasado martes, la Asociación de Hostelería y Restauración de Ourense (Arhou) ya mostró su descontento ante el posible aumento de las normas restrictivas por el incremento de casos en la ciudad. Los integrantes de la entidad aseguran que están dispuestos «a no acatar las nuevas medidas».
«Si la decisión se toma individualmente tendríamos un problema individual, pero si es una decisión que tomamos de manera conjunta y global, el problema ya no es nuestro, será de la administración», sostienen.
Este miércoles, tras conocerse que la Xunta de Galicia permitirá el ocio nocturno en los ayuntamientos de nivel medio –entre los que se encuentran Ourense–, pero con la obligatoriedad de presentar una PCR realizada 48 horas antes o el certificado de doble vacunación, Arhou no ha cambiado de parecer y mantiene que «las medidas son excesivas y sin sentido».
«Piden o PCR o doble vacunación. ¿Quién está vacunado actualmente para ir a un pub? Los mayores de 40, y no son ellos los que van», han criticado. «Me parece una medida como todas las demás, sin ningún tipo de sentido», censura esta entidad.
Así, Roberto González, uno de los integrantes de Arhou, ha manifestado que se encuentran en proceso de votación para decidir si cumplen las nuevas normas o no. «Es una propuesta que se ha llevado la asamblea y ahora se tomará la decisión, lo que salga será lo que se realice», pero ha insistido: «No vamos a seguir pagando el pato, nosotros no somos los culpables, la causa de la situación sabemos donde está. Queremos trabajar».
NOTICIA «POSITIVA» DE LA XUNTA
Por su parte, Ovidio Fernández, de la Confederación de Hosteleros de Ourense el presidente, ha subrayado que hay parte del sector que «está dispuesto a desobedecer las normas» y que es «entendible» porque hay una serie de establecimientos que «tienen en juego su supervivencia». «Entre el agravio de lo que se viene encima y de la situación que se ha vivido tienen una preocupación comprensible», lamenta.
Con todo, Fernández ha asegurado que el nuevo mensaje de la Xunta de Galicia es una noticia «positiva» porque lo interpretan como «una demostración de confianza a un sector que ni fue ni es responsable o culpable de la situación sanitaria».
«Hubo un tiempo en el que se nos tachó, aunque no fuese así, y las medidas tomadas pudieron no ajustarse a la realidad, así que proponer continuar con la apertura, aunque sea tomando más responsabilidad por parte de los establecimientos, nos parece bien» ha asegurado Ovidio Fernández, que coincide con la Asociación de Hosteleros en que: «Lo que queremos, por encima de todo, es seguir trabajando».
El presidente de la Confederación ha destacado que la «situación es penosa» tanto que puede llevar a un cierre definitivo. «Se dice fácil, pero es macabro porque son puestos de trabajo y familias enteras que viven de esto; no hay alternativa: o trabajamos o no tenemos de qué vivir, y eso es muy fuerte».
Además, ha apelado a pensar en el momento que vive el sector. «Se creían que ya habían pasado por lo peor, estamos en temporada alta, es la época de resarcirse para ver si podrán salir adelante», razona.
Así, ha insistido en que entre pedir PCR o el cierre definitivo, «la posición está clara». De cara al próximo fin de semana pide «que no se produzca una guerra de encontronazos y que se cumplan con las responsabilidades individuales».