El sindicato UGT ha instado al Gobierno central a que tutele a través de la SEPI la operación de venta de la planta de San Cibrao –Cervo (Lugo)– y así evalúe al posible comprador de la factoría, toda vez que la central desconfía de las practicas de la multinacional Alcoa, a la que acusan de «bloquear» el proceso.
El secretario del sector siderometalúrgico de UGT, Alberto Villalba, se reunió el miércoles con los representantes del sindicato en la planta mariñana para conocer la situación en la fábrica, que ven con «enorme preocupación» por el «incierto» futuro de la factoría y por la «actitud de bloqueo» que perciben en la compañía estadounidense.
Por ello, reclaman al Gobierno que adopte una postura activa en el proceso para viligar la posible venta y analice al posible comprador. Sobre esto, reclaman que la parte social esté informada de forma «detallada» sobre los proyectos industriales que barajan las seis empresas que se han interesado por la planta.
Estas compañías, continúa UGT, deberán comprometerese a llevar a cabor «un plan industrial y la planificación eléctrica como máxima garantía mantenimiento empleo», al tiempo que solicitan que se garantice desde las administraciones un precio «competitivo» en la tarifa de la luz.
En este sentido, el sindicato se ha dirigido a la Xunta para solicitar que «desbloquee» los proyectos de aerogeneración presentados por Endesa para el área de As Pontes y que, según UGT, repercutirían en el proceso de venta de la factoría de aluminio.
«Sin el mantenimiento de la producción de energía de proximidad y competitiva en As Pontes, el futuro industrial de la planta quedaría seriamente perjudicado. Está en las manos de la Xunta que se garantice el futuro de 600 trabajadores de la factoría de San Cibrao», remarca el sindicato en un comunicado.