El buque ‘Stalwart’, del tipo AOR, construido en las instalaciones de Navantia Ferrol, ha zarpado en el mediodía de este jueves, 20 de mayo, rumbo al puerto australiano de Perth, en donde el barco militar tendrá su base.
De este modo, el astillero ferrolano ha entrado en subactividad, ya que no tiene ningún contrato que materializar, hasta el inicio de las fragatas F-110 para la Armada española, cuya ejecución no está prevista iniciar hasta el verano de 2022.
El buque militar ha zarpado sobre las 13,15 horas al mismo tiempo que se interpretaban los himnos nacionales de Australia y España, aguardándose que su singladura hasta llegar a su país de destino se prolongue durante algo más de un mes.
A pie de muelle, para participar en esta despedida, han estado la embajadora de Australia en España, Sophia McIntyre, el presidente de Navantia, Ricardo Domínguez, y el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, además de otras autoridades, así como representantes del comité de empresa y delegados de la industria auxiliar que han desplegado sus pancartas para recordar que este complejo industrial se queda sin carga de trabajo, situación que está prevista que se mantenga durante más de un año.
CONSTRUCCIÓN DE HASTA CUATRO BUQUES
La embajadora australiana en España ha traslado que «el papel de Navantia en la construcción de cuatro clases de buques para Australia ha constituido un pilar importante en el desarrollo y la evolución» de sus «vínculos políticos, económicos, militares y culturales». «Es un honor para Australia haber ocupado un lugar en la histórica e impresionante tradición de construcción naval de Galicia», valora.
Por su parte, el presidente de Navantia, Ricardo Domínguez, ha detallado que «Australia ha confiado en Navantia para suministrar una capacidad decisiva para lograr sus objetivos estratégicos en el ámbito marítimo», de forma que «Navantia seguirá siendo su socio en el futuro».
Igualmente, Domínguez ha reconocido el esfuerzo de los trabajadores y ha destacado la importancia del próximo programa para la Armada española, las fragatas de la clase F-110.
SIN ACTIVIDAD
Por su parte, el presidente del comité de empresa de Navantia Ferrol, Emilio García Juanatey (CCOO), ha detallado, a preguntas de los medios de comunicación, que «hoy no es un día de celebración, ya que se va un barco». «No tenemos con qué sustituirlo, nos quedamos sin nada que hacer y las opciones que tenemos no salen», expone.
El representante sindical ha detallado que ha mantenido un breve encuentro, «de unos minutos», con el presidente de la empresa naval pública: «Al que le trasmití la necesidad de dotarnos de carga de trabajo, y su respuesta ha sido que no hay nada y que no ve que en el futuro próximo tengamos actividad».
HISTORIA
El contrato de los dos buques AOR, firmado con la Commonwealth de Australia, en mayo de 2016, ha supuesto para los astilleros de la ría de 1,5 millones de horas de trabajo por buque, lo que ha significado unos 1.800 empleos.
Ha sido el tercer contrato acometido para este cliente, tras la construcción de dos buques LHD, gemelos del ‘Juan Carlos I’ de la Armada española y también ejecutados en su mayor parte en Ferrol, así como sus 12 lanchas de desembarco.
A esto se une el diseño y transferencia de tecnología para tres destructores AWD, un proyecto basado en las fragatas F-100 y que se ha materializado en astilleros de Australia con la participación de personal de Navantia en aquel país.
Este contrato de los dos buques AOR incluye también su mantenimiento durante los primeros cinco años. Asimismo, también requerirá una importante participación de la industria australiana que será responsable de la instalación y pruebas de elementos de los sistemas de combate y comunicaciones, así como de algunas áreas logísticas.
Tras completar estos trabajos, el barco será entregado a la Commonwealth de Australia el 31 de agosto.