El Parlamento gallego ha aprobado, por unanimidad, una iniciativa en la que demanda a la Xunta que se dirija al Gobierno central para que dé una solución «urgente» al bloque que existe en la actualidad a la comercialización de capturas de marrajo.
Esta iniciativa del Grupo Popular ha sido defendida por el diputado Alberto Pazos Couñago, quien ha señalado que el comisario europeo de Medio Ambiente ha asegurado que la «prohibición de la venta y retención del marrajo lleva un quebranto económico para la flota y no ha demostrado beneficios ambientales».
«La flota gallega cumple escrupulosamente todas las exigencias, pero el Gobierno central insiste en atacar al mismo sector pesquero al que debería defender, exigiéndole condiciones más duras que sus competidores», reprueba el diputado.
Y es que alerta que la flota gallega de palangre «está sufriendo graves problemas económicos por la decisión del Gobierno de España de impedir la venta de 90 toneladas de marrajo, capturadas cumpliendo estrictamente toda la legalidad nacional e internacional».
Así, reprocha la actitud del Gobierno central de «autolimitar» las capturas de esta especie por debajo del Total Admisible de Capturas (TAC) permitido por las autoridades internacionales.
OTRO ACUERDO
Por otra parte, en esta comisión ha salido adelante una iniciativa del BNG –por unanimidad tras ser transaccionada– en el que se insta a la Xunta a mantener las condiciones de autorización de ocupación del pantalán de embarcaciones tradicionales que usa el Club Mariño A Reiboa en el muelle de Chousa desde 2011, de forma que se exima a este club del pago de la tasa x5 o que sea bonificada en el máximo legal.
Este acuerdo también insta a desarrollar de manera urgente y consensuada con el sector el decreto 52/2019 por la que se declaran bienes de interés cultural de patrimonio inmaterial las técnicas constructivas de la carpintería de ribera.