Los trabajadores de la planta de Alcoa en San Cibrao (Lugo) y de empresas auxiliares se han congregado este domingo, en un «encuentro familiar», en la playa de As Catedrais para seguir reclamando soluciones que eviten el cierre de las instalaciones y el despido de 534 personas.
Los trabajadores y sus familias acudieron a las 12,00 horas al turístico arenal, situado en A Mariña, con pancartas rechazando el cierre. Además, escribieron mensajes sobre la arena pidiendo una intervención de la planta por parte del Gobierno.
La multinacional estadounidense Alcoa ha presentado un expediente de regulación de empleo (ERE) para 534 trabajadores cuyo periodo formal de consultas se alargará hasta el 4 de agosto. El mes establecido para estas negociaciones terminaba el 24 de julio, pero se llegó a un acuerdo el jueves para tratar de ganar tiempo.
La empresa insistió entonces en que está dispuesta a «estudiar cualquier alternativa» para el futuro de la planta, pero vinculó una posible venta a la hibernación de las cubas porque «un proceso de este tipo requiere tiempo para ejecutarse y su éxito es incierto».
Mañana lunes se vuelve a reunir la mesa multilateral de Alcoa, en la que estarán presentes también representantes de las auxiliares. Al encuentro, el comité de empresa vuelve a llevar la petición de que no se paralicen las cubas.