La Xunta de Galicia ha presentado este martes el ‘Plan Ribeira Sacra. Plan de gestión del paisaje cultural 2020-2023’, un proyecto que representa más de 34 millones de euros en actuaciones de mejora y que se sitúa como «un paso relevante» en el camino hacia la inclusión de esta zona en la lista del Patrimonio Mundial de la Unesco.
«El Gobierno gallego lleva mucho tiempo trabajando en esta candidatura», ha destacado el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, durante la presentación del documento en Ourense.
El plan se articula en siete programas y contiene 35 acciones a desarrollar en un área de aproximadamente 3.000 kilómetros cuadrados, en la que residen cerca de 64.000 habitantes.
La iniciativa incluirá mejoras en campos como el patrimonio y el paisaje cultural; la ordenación del territorio; la conservación de los valores naturales y el medio ambiente; el desarrollo económico sostenible; la gestión del turismo; la educación; la formación e investigación o la comunicación y participación, según ha señalado Feijóo.
Además, define una estrategia común para la correcta conservación y protección de la Ribeira Sacra como una zona de especial interés por «su excepcional Románico y patrimonio antropológico», entre otros.
En este contexto, Feijóo ha señalado que, «en paralelo al avance de esta planificación», también se suma el Plan de acción estratégico para la Ribeira Sacra en el que se inscribe la candidatura técnica de la Reserva de la Biosfera de la Ribeira Sacra y Serras do Oribio y Courel. «Sería un gran hito para Galicia que la Ribeira Sacra obtuviese los dos reconocimientos», ha insistido.
PLAN ESPECIAL DE INFRAESTRUCTURAS OS PEARES
Por otra parte, Feijóo también ha participado en la firma de la Orden de aprobación definitiva del Plan especial de Infraestructuras y dotaciones del consorcio local de Os Peares.
Se trata de un instrumento «de vanguardia» en la ordenación del territorio, que abarca dos provincias y cuatro ayuntamientos, «haciendo de la complejidad una oportunidad», ha especificado Feijóo.
El plan cuenta con una partida de 15 millones de euros que se invertirán en distintas acciones como: la urbanización del borde fluvial del río Búbal, la pavimentación de accesos a la estación de tren o la ampliación del paseo del río Miño, ya en marcha.