La valedora do Pobo, María Dolores Fernández Galiño, ha recordado a la Xunta la obligatoriedad de respuesta que tiene ante una queja presentada por la Comisión pola Recuperación da Memoria Histórica da Coruña por la ausencia de visitas a la Casa Cornide, propiedad de la familia y que fue declarado Bien de Interés Cultural en mayo de 2023.
Esta consideración, que determina su apertura al público general para visitas, no está siendo cumplida más de un año después, por lo que la entidad memorialística de la ciudad herculina presentó a mediados de abril una queja formal ante el Alto Comisionado del Parlamento gallego para que intercediese ante la Consellería de Cultura ante el incumpliento de la ley que obliga a los propietarios de BIC a permitir visitas durante, al menos, cuatro días al mes.
En una respuesta facilitada por la CRMH de A Coruña, el Valedor reconoce que el Gobierno gallego no ha remitido el informe sobre los motivos por los que permanece cerrado a visitas el inmueble y añade que, a través de un escrito, se recordó a la Xunta la obligatoriedad que marca la normativa de responder a los requerimientos de este tipo.
La entidad reclamante subraya que la ley obliga a los titulares de bienes declarados de interés cultural a permitir su visita pública gratuita durante, al menos, cuatro días al mes por un espacio de cuatro horas, algo que, como inciden, los herederos del dictador no están cumpliendo.
La CRMH de A Coruña denuncia el «ya prolongado incumplimiento de las obligaciones legales» de los propietarios de la Casa Cornide, una negativa que ve «amparada» por la Xunta.