La familia del escritor, periodista y filósofo Celestino Fernández de la Vega, nacido en Friol (Lugo) en 1914, reclama 36 años después de su muerte que se le dedique un Día das Letras Galegas.
Así lo pide precisamente cuando estos día ha salido una tirada de cinco millones de sellos dedicado al polifacético autor, que también escribió en varios medios impresos como, por ejemplo, el diario ‘El Progreso’.
Uno de sus sobrinos, Carlos Fernández de la Vega, ha confesado que, tras esta serie de sellos que ya se han puesto en circulación, es «un honor muy importante» para la familia. «Con muy pocos literatos gallegos se ha hecho esto, si no recuerdo mal creo que solo se hizo una edición de sellos a Rosalía de Castro», ha subrayado.
Además, ha recordado cómo Celestino «fue secretario en el Gobierno civil», volcándose en la escritura y relatando cómo participaba en tertulias «en el Méndez Núñez y en el Café Madrid» de la ciudad de Lugo.
En esas «tertulias» coincidía con Ánxel Fole, Pimentel o Manuel María, autores a los que «se les ha dedicado un Día das Letras Galegas» mientras a Fernández de la Vega todavía no, según ha reprochado.
Aunque hace diez años estuvo «entre los finalistas» para ese día, su sobrino ha protestado porque «parece que la Real Academia Galega se ha olvidado de él, y tiene méritos suficientes y, además, murió hace más de 30 años».
Sobresale un libro por encima de todos en que Carlos Fernández de la Vega pone el foco: el tratado sobre el humor titulado ‘O Segredo doHumor’. A su vez, publicaba, entre otros, ‘El enigma de Santa Eulalia de Bóveda’ un escritor que cultivó su amistad con «Castelao o Piñeiro». También coincidió con Pío Baroja en Madrid.