El Observatorio da Cultura Galega constata que la cultura ha padecido un «mayor» impacto de la crisis del coronavirus que otros sectores productivos, con especial incidencia por el parón durante el estado de alarma.
En su estudio ‘Conxuntura estatística do ámbito cultural’, se recoge que el 667 del sector cultural solicitaron un ERTE, de las que dependen más de 4.000 empleados, cerca del 30% del total. Hubo con una pérdida de 1.002 cotizantes, lo que supone una caída del 6,3%.
Este retroceso es de 2,1 puntos por encima del descenso medio de empleo en Galicia. El desplome de las exportaciones también afectó más a productores culturales que a otros sectores.
Además, el estudio señala que hay un descenso de hogares gallegos que prevén ir al cine o al teatro en los próximos tres meses.
Entre enero y mayo se crearon 44 empresas en el ámbito cultural –concentradas en las provincias de A Coruña y Pontevedra–, lo que supone 11 menos que en el mismo periodo de 2019.
La bajada ha sido más acusada para las actividades de creación, artísticas y espectáculos (-10,4%), seguida de cinematografía, programas de televisión y edición musical.
Con todo, se apunta el dato «esperanzador» de que entre abril y mayo aumentaron las afiliaciones en el sector cultural un 2,7%, más que el 1%.