El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha advertido de que si no pueden cumplir con las medidas estipuladas para la reapertura de las playas, los ciudadanos no podrán usarlas pese a estar en una zona en fase 2, y ha aclarado que su Ministerio «no va a financiar» este coste, ya que corresponde a las comunidades autónomas o los municipios.
«La orden ministerial que contempla la fase 2 establece unas medidas para la apertura de playas que tienen que cumplirse, naturalmente. Si hay imposibilidad para adoptar esas medidas que figuran en la orden, las playas no pueden usarse. El Ministerio de Sanidad no va a financiar esto sino que corresponde, en todo caso, a las comunidades autónomas o a los propios municipios», ha indicado este viernes Illa en rueda de prensa desde La Moncloa.
En este sentido, ha insistido en que corresponderá a las comunidades autónomas velar por que se cumplan las medidas en las playas», tras lo que ha ensalzado el papel que juegan los municipios en estos momentos.
No obstante, ha remarcado que la «clave» es la responsabilidad individual y que los ciudadanos se comporten de una forma «ejemplar» para poder adaptar esta nueva situación.
La orden de Sanidad sobre la fase 2 estipula que el tránsito y permanencia en las playas se realizará manteniendo una distancia mínima de seguridad de, al menos, dos metros, o, en su defecto, medidas alternativas de protección física, de higiene de manos y etiqueta respiratoria. A estos efectos, los grupos deberían ser de un máximo de 15 personas, excepto en el caso de personas convivientes.
Los bañistas deberán hacer un uso responsable de la playa, tanto desde el punto de vista medioambiental como sanitario, cumpliendo para ello con las recomendaciones y normas establecidas por las autoridades sanitarias.
Asimismo, se permite la práctica de actividades deportivas, profesionales o de recreo, siempre que se puedan desarrollar individualmente y sin contacto físico, permitiendo mantener una distancia mínima de dos metros entre los participantes.