La protesta de Alcoa en la ciudad de Lugo ha condicionado el desarrollo del pleno de la Diputación provincial. Decenas de trabajadores irrumpieron en el edificio, donde fueron recibidos por el propio presidente de la institución, José Tomé.
El pleno se inició con una media hora de retraso. Al inicio de la sesión, la portavoz del PP, Elena Candia, quiso que se modificara el orden del día para tratar una moción para la supervivencia de Alcoa, a lo que se negó el presidente, José Tomé.
El momento de más tensión se produjo cuando irrumpieron decenas de manifestantes a la sala de invitados. A pesar de ello, tras la intervención de los trabajadores de seguridad, los trabajadores abandonaron la sede provincial sin incidentes.
Entre los puntos aprobados se encuentra la propuesta de modificación de las directrices sobre la consulta previa en el procedimiento de elaboración de las Ordenanzas y Reglamentos Provinciales.
También recibió respaldo unánime el convenio de colaboración entre la Diputación de Lugo y el Ayuntamiento de Becerreá para la ejecución de los fines comunes consistentes en la demolición de la edificación del antiguo hogar escuela y construcción y gestión de un centro de día y residencial comarcal.