Este 7 de noviembre, las plantillas de los Paradores de Galicia han vuelto a concentrarse frente a las puertas de sus centros de trabajo en toda la Comunidad para tratar de visibilizar la situación de «abandono institucional y empresarial que arrastran desde hace más de cuatro años y antes de verse obligados a adoptar medidas más contundentes».
Tras la concentración celebrada a las puertas de las oficinas centrales de Paradores en Madrid, y las reiteradas peticiones en redes sociales mediante un reto viral con los hashtags; #PorUnConvenioDignoYa y #ParadoresGritaEnSilencio, reclamando un convenio justo, según los sindicatos, la alta Dirección de la empresa continúa sin mostrar prueba alguna para desbloquear esta situación y, de esta forma, alcanzar un acuerdo.
«Su estrategia parece clara: dejar pasar el tiempo esperando que el conflicto se diluya y eludir su responsabilidad», manifiestan los sindicatos en una nota de prensa.
Ante esta actitud, «la plantilla ha decidido alzar de nuevo la voz». Denuncian condiciones laborales precarias, salarios «ridículamente insuficientes» y una conciliación familiar «inviable» debido a «la extrema flexibilidad, los turnos rotativos y, especialmente, el turno partido, que normalmente se extiende durante cuatro horas por la mañana y tres horas y media por la tarde-noche, incluyendo fines de semana y festivos».
Las reivindicaciones de la plantilla, sostienen, son claras: «Salarios justos con los que la plantilla pueda llegar a fin de mes y vivir dignamente, implantación definitiva y de una vez por todas del Plan de Pensiones, desarrollo profesional, estabilidad en el empleo, jornadas parciales mínimas garantizadas, mejoras en la gestión de la incapacidad temporal, jubilaciones parciales, reducción progresiva de jornada y una planificación anticipada de turnos que permita una conciliación real».

