La plantilla de Navantia ha aprobado este jueves en referéndum el acuerdo sobre el convenio colectivo para el periodo que se prolonga hasta 2029, tras un proceso de votación celebrado en todos los centros de la compañía que se ha saldado con un apoyo del 63,27%.
En un comunicado, el grupo de astilleros integrado en el holding público SEPI ha destacado que el acuerdo, «fruto de meses de intensas negociaciones entre la dirección y el comité intercentros representa un hito clave para consolidar la estabilidad laboral y afrontar con garantías los retos estratégicos y la carga de trabajo de los próximos años».
Una vez aprobado el acuerdo por la plantilla, la dirección solicitará las autorizaciones necesarias al Ministerio de Hacienda para proceder a la firma definitiva y posterior publicación del acuerdo en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Navantia señaló que el acuerdo alcanzado sobre el convenio, que contempla una subida salarial progresiva, con incrementos por encima del IPC cada año, introduce «mejoras sustanciales» no solo en materia de política salarial, sino también en clasificación profesional, condiciones de trabajo y mecanismos de rejuvenecimiento de plantilla, «con el objetivo de acompañar el crecimiento de la compañía y reforzar su competitividad en los sectores de defensa, construcción naval y energías verdes».
Así, valoró que el acuerdo «sienta las bases para una gestión del capital humano a la altura de los desafíos que afrontará la compañía: una elevada carga de trabajo y una profunda evolución tecnológica».
ESTABILIDAD Y DESARROLLO PROFESIONAL DE LA PLANTILLA.
El presidente de Navantia, Ricardo Domínguez, consideró que este acuerdo proporciona al grupo «estabilidad y herramientas para fomentar el desarrollo profesional de la plantilla».
«Navantia tiene mucho que ofrecer a las personas trabajadoras actuales y futuras. Agradezco sinceramente al Comité Intercentros su empeño en sacar adelante este convenio que moderniza nuestras relaciones laborales», dijo.
Entre los principales avances destaca la consolidación de una política salarial «sólida y sostenible, basada en criterios objetivos y compartidos, que reconoce el mérito y promueve la evolución profesional de la plantilla».
Además, desarrolla un modelo de clasificación profesional que facilita la movilidad interna y la planificación de carreras y se define un nuevo catálogo de puestos para los grupos profesionales con itinerarios de promoción y criterios de evaluación homogéneos en todos los centros.
El texto también avanza en la homogeneización de condiciones laborales entre los distintos centros de trabajo. En este sentido, se han acordado medidas para armonizar la flexibilidad horaria, los turnos especiales, las jornadas de fin de semana y las bolsas de horas, así como los pluses por desplazamiento, mando, responsabilidad o participación en pruebas de mar.
Igualmente, se contemplan mecanismos de jubilación parcial con contrato relevo y desvinculaciones voluntarias. Estas herramientas permitirán abordar el relevo generacional de forma ordenada y sostenible, garantizando la transferencia de conocimiento y la incorporación de nuevos perfiles profesionales.
DATOS POR CENTROS
La participación total de los siete centros de trabajo alcanzó el 70,69% del censo de la plantilla, con 4.088 votos emitidos sobre un total de 5.783 trabajadores con derecho a voto.
El escrutinio también registró 20 votos nulos y 14 votos en blanco. Si bien el respaldo es sólido a nivel global, los resultados por centros de trabajo revelan una fuerte disparidad territorial.
Así, el astillero de Ferrol fue el centro con mayor número de votos a favor (856) y un apoyo del 63,37%. Puerto Real (Cádiz) registró el apoyo porcentual más alto, con el 80,89% de sus votos a favor del ‘sí’. Los otros dos astilleros andaluces, Cádiz y San Fernando, también mostraron una adhesión contundente al preacuerdo, con un 85,32% y un 69,25% de votos afirmativos, respectivamente.
El único centro que votó mayoritariamente en contra fue Cartagena (Murcia), donde el ‘no’ obtuvo 537 votos (un 56,38% del total de votos emitidos) frente a 343 votos a favor. Por último, los servicios centrales, situados en Madrid, sumaron un 85% de las papeletas a favor, con 186 sufragios, frente a 31 en contra.