El Parlamento de Galicia ha rechazado, con los votos en contra del PP y la abstención del PSdeG, una propuesta del BNG para regular el sector de las plantas de biogás y biometano.
Coincidiendo con su debate en el pleno, un grupo de personas se ha concentrado a las puertas de la Cámara autonómica para mostrar su rechazo a la proyectada en Coeses (Lugo).
En defensa de la iniciativa, la nacionalista Montserrat Valcárcel ha cuestionado que se planteen «macroproyectos» –plantas «grandes»– en lugares como este y Curtis (A Coruña) y Xunqueira de Ambía (Ourense).
Al respecto, ha afirmado que «pueden ser una solución eficaz» en el marco de la transición energética «siempre que se implementen con unos criterios rigurosos».
Por ello ha defendido la proposición no de ley, con el ánimo de evitar que «lo que es una buena idea se convierta en un nuevo problema ambiental».
Por parte de los socialistas gallegos, Patricia Iglesias ha coincidido en resaltar la «contribución» de estas plantas a la economía circular, así como el «impulso que debe suponer en zonas» ante reto demográfico.
En cualquier caso, ha planteado una enmienda de sustitución al entender que el texto del Bloque «no se adapta a la realidad territorial de Galicia», con un «tejido agrario muy fragmentado». «Creemos que necesitamos antes de una norma una planificación integrada, territorial (…) Regulación sí, pero con criterios adaptados», ha destacado.
En su turno, el popular Gonzalo Trenor ha criticado que «en esta iniciativa hay cosas muy raras», al señalar que en la exposición de motivos hay «un copy-paste de un periódico de Castilla y León».
«Ese es su rigor», ha censurado, antes de instar al BNG a que aceptase una «transacción sensata y lógica» para adaptar la iniciativa «a las necesidades de Galicia y no de Castilla y León». Finalmente, los grupos han votado el texto original, que no ha salido adelante.
PROTESTA A LAS PUERTAS DEL PARLAMENTO
Coincidiendo con el debate de esta propuesta, un grupo de personas se ha movilizado a las puertas del Parlamento tras una pancarta en contra de la planta de biometano proyectada en Coeses, con el lema ‘Lugo non quere cheiros’.
En declaraciones a Europa Press, Daniel Vispo, de Adega y vecino de Lugo, ha criticado que el proyecto de Bioenergía Lugo está ubicado «cerca de viviendas» y ha subrayado que este tipo de plantas «necesitan una regulación, no se pueden poner en cualquier sitio, a capricho de un promotor».
Así, ha alertado de «todos los impactos medioambientales que hay detrás de esto», en referencia sobre todo a «contaminación atmosférica» y del agua. «Hay que evaluarlo bien antes de promover una planta en el sitio donde está», ha incidido.
En este sentido, ha recordado que la confederación hidrográfica «no autorizó el vertido de aguas residuales a la cuenca del Miño», y ha adelantado que seguirán «movilizados» porque tienen «miedo» de que la empresa «quiera continuar el proyecto, bien presentando recurso o bien modificándolo o presentando otro».