La supervisora general del Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo, Elsa Iglesias, ha defendido este martes la necesidad de construir el nuevo centro sanitario, y ha subrayado la «mejoría evidente» en la atención a los pacientes y en el desempeño de los profesionales tras el traslado: «pasamos de un 600 a un Mercedes».
Así lo ha trasladado en su comparecencia en la Comisión no permanente de Investigación sobre los contratos de la Xunta y sobre el sobrecoste del hospital vigués.
Elsa Iglesias ha relatado los problemas que sufrían profesionales y pacientes en el viejo Hospital Xeral vigués, con espacios reducidos, habitaciones compartidas y con un solo baño, ausencia de condiciones de habitabilidad en salas de trabajo y de descanso, falta de climatización o problemas de saturación en el servicio de Urgencias, que obligaban incluso a ingresar a pacientes en los pasillos.
El Hospital Álvaro Cunqueiro, puesto en marcha en 2015, supuso una mejora en todos esos aspectos, ha destacado, y acabó con la aglomeración de pacientes, permitiendo una «gestión dinámica y con capacidad de adaptación a las necesidades».
Al respecto, ha destacado que el nuevo hospital permite ‘desdoblar’ camas en habitaciones de ingreso, lo que, sumado a la capacidad de otros servicios y unidades, algunas de nueva creación, supone que la capacidad máxima del Álvaro Cunqueiro puede alcanzar las 1.520 camas.
La compareciente ha recalcado que no tiene relación alguna con los contratos que la Comisión pretende investigar ni con el modelo concesional elegido en este hospital vigués. Con todo, sí ha explicado que el único contacto que, como supervisora, mantiene con la concesionaria, se hace a través de una plataforma informática para notificar incidencias de mantenimiento. «Y en media hora me contestan, entre otras cosas, porque si no, les penalizan», ha añadido.
«NADA» QUE APORTAR A LA INVESTIGACIÓN
Tras la exposición de Elsa Iglesias, el diputado del BNG, Luis Bará, ha lamentado que la información explicada «no aporta nada a la investigación» que se supone ha de llevar a cabo esta comisión parlamentaria. «Son comparecencias que le interesan al PP en su afán de boato», ha constatado.
Bará ha reiterado que no se cuestiona la necesidad de un nuevo hospital, pero ha acusado al PP de haber usado Vigo como «campo de pruebas» para poner en marcha un modelo de concesión que responde al «interés ideológico» de los ‘populares’, de «convertir la sanidad en un negocio».
El diputado nacionalista — que ha insistido en recordar el gran «malestar» generado entre ciudadanos y personal sanitario por los problemas en los primeros meses de la puesta en marcha del hospital, y por los recortes del PP en la sanidad pública–, ha repetido las críticas del BNG por los problemas que, ha asegurado, tienen para acceder a la documentación del plan de trabajo de la comisión. «No tuvimos acceso en tiempo y forma. Y la documentación es un fraude, una tomadura de pelo. No queremos una lista de contratos, queremos los expedientes», ha subrayado.
De hecho, después de que el diputado del PP, Roberto Rodríguez, le espetase que la oposición «es deudora de su negativa a transaccionar cualquier plan de trabajo», Luis Bará ha planteado la posibilidad de «ampliar la documentación» incluida en ese plan. «Se puede hacer, si no tienen nada que ocultar. Pero lo que quieren es obstruir el acceso», ha subrayado el parlamentario del BNG, que ha advertido: «Pero la vamos a conseguir, por la vía que sea, legal por supuesto, porque si la ocultan es que hay algo que no quieren que sepamos».
Por su parte, la diputada del PSdeG, Elena Espinosa, ha optado por no plantear preguntas a la compareciente, para no «ponerla en un apuro», en vista de que nada tiene que ver con las cuestiones que se investigan en la comisión. No obstante, ha querido aprovechar su intervención para agradecer el trabajo «tan complejo» que hicieron las profesionales de Enfermería en el traslado del Xeral al Cunqueiro, y también su labor en el «día a día».
«ÚNICA POSIBILIDAD» PARA HACER UN NUEVO HOSPITAL
Mientras, el diputado del PP, Roberto Rodríguez, ha defendido la necesidad de «escuchar» a personas que trabajaron en el Hospital Xeral y luego en el Álvaro Cunqueiro, que ofrecen «un contexto» sobre la necesidad del nuevo centro sanitario, ya que la realidad del antiguo «incluso atentaba contra la dignidad de los pacientes».
Así, ha incidido en que, en aquel momento de crisis, el modelo concesional era «la única posibilidad» para hacer un nuevo hospital, cumpliendo con los requisitos de deuda, y en el menor tiempo posible. La situación, a su juicio, «no admitía demora».
El diputado ‘popular’ ha subrayado que «a la oposición le molesta mucho que se hiciera un hospital de referencia» en Vigo, y que «llevan desde 2009 manteniendo un relato del Álvaro Cunqueiro que no se corresponde con la realidad». «No se cobra por el agua a los pacientes, como dijeron ustedes; no se cobra por usar los sillones de acompañantes, como dijeron ustedes», ha aseverado, y ha señalado que mucha gente acudió a las manifestaciones contra el hospital «condicionada» por las «mentiras» que se vertieron cuando empezó a funcionar el Álvaro Cunqueiro.