La CIG-Ensino pide explicaciones a la Consellería de Educación, Ciencia, Universidades e FP sobre su voluntad de «limitar la información» que da a las asociaciones de madres y padres (ANPA) sobre los centros, pidiéndoles que soliciten datos a través de los mecanismos de transparencia.
El sindicato secunda de esta manera la denuncia realizada esta semana por la Confederación de Anpas Galegas después de que la Jefatura de Inspección de Lugo remitiese a las direcciones de los centros una instrucción en la que les señalaba que cifras como el número de alumnos, el de aquellos con necesidades especiales y el de las unidades se debían tramitar «a través de una solicitud de información pública» regulada en la ley de transparencia.
El sindicato mayoritario cree, tal y como expone en un comunicado, que este correo «marca un paso más en la deriva de ocultación de la realidad de los centros educativos» por parte de la Xunta en un comienzo de curso «destacado por la enorme avalancha de propaganda y mentiras» por parte de sus responsables.
En este contexto, la CIG lamenta que la Inspección «parece olvidar que las madres y padres forman parte del consejo escolar» y que a las ANPA, «igual que al profesorado» y a las «organizaciones sindicales» los mueve la «defensa del propio centro y de la enseñanza pública en general».
«Malamente se puede luchar por el futuro de un centro si a quien quiere defenderlo se le niega la información que permite demostrar cuáles son las carencias y las necesidades de ese centro», sentencia el sindicato, que pide una rectificación del contenido de la instrucción.