La Xunta y la Fundación Paideia han suscrito un convenio de colaboración que busca lograr mejoras genéticas en la reproducción de frondosas autóctonas con el objetivo de «disminuir la dependencia externa en la comercialización de especies» como el roble y el cerezo.
Este jueves en A Coruña, el titular de Medio Rural, José González, ha participado en la presentación del convenio, donde ha destacado que este tipo de colaboraciones «contribuyen a dar respuesta a la demanda actual del sector forestal».
Así, según recoge un comunicado de la Xunta, ha señalado como objetivo del plan fomentar la producción en Galicia de especies como el roble y el cerezo para cubrir la demanda forestal «con un material forestal de reproducción de calidad y mejorado genéticamente».
«Es necesario asegurar un correcto establecimiento de la viabilidad de futuro en las repoblaciones de los montes gallegos», ha apuntado el conselleiro, que también ha hecho referencia al trabajo realizado en el laboratorio de biotecnología vegetal de Galicia (Cultigar).
Allí, desde la puesta en marcha de un convenio en octubre del pasado año, se produjeron más de 4.250 unidades de diversos clones de cerezo y 325 árboles diferentes de roble, que están distribuidas en tres campos de ensayo en diferentes regiones climáticas –Trasmiras, Santa Comba y Chantada–.
